Aprendizaje

"¿Durante cuánto tiempo y cuántas veces hay que repetir una acción para que quede programada?, cuanto más se repite mayor es la conectividad. También existe la posibilidad de practicar siempre que se disponga de un tiempo libre, gracias al ensayo mentalque pone en funcionamiento los mismos circuitos neuronales que la actividad real"Daniel Goleman

Aprendiendo a regular una emoción.

http://enbuscadeantares.com/2014/07/31/tic-tac-tic-tac-ticaprendiendo-a-regular-una-emocion/ 

remedios-naturales-para-el-insomnio-1Muy probablemente alguna noche y siendo víctima de insomnio, el segundero de un reloj te ha llamado la atención; tic tac, tic tac, tic tac.
Reacomodas la postura, moldeas un poco la almohada, cierras los ojos e intentas conciliar de nuevo el sueño; mañana tienes una importante junta.
Sin embargo, al paso de unos segundos te das cuenta que lo único que escuchas es el reloj; tic tac, tic tac, tic tac. Sí, ese sonidito se ha apoderado de tu atención y empieza a incomodarte.
Intentas de nuevo. Ahora hasta te pones la almohada sobre la cabeza para obstaculizar el ruido, pero apenas tu mente empezaba a descansar y te percatas que este aún está ahí; tic tac, tic tac, tic tac.
Te desesperas. Te sientas sobre la cama y suspiras. Te acuestas de nuevo y ahora intentas con ganas ignorar el reloj y quedarte dormido.
Por unos minutos lo logras, pero de pronto te clavas en el estímulo auditivo una vez más y este no solo sigue dando lata sino que se acrecienta. Es decir, a pesar de que el volumen no ha subido tú cada vez lo escuchas más fuerte.; tic tac, tiC TAC, TIC TAC.
Y aunque ese reloj siempre ha estado ahí, esta noche te ha llevado hasta la frustración y decides bajarlo y quitarle la pilas.
Regresas a la cama e intentas por fin conciliar el sueño, pero aún te tomará un buen rato lograrlo; el tic tac, tic tac, tic tac a afectado tu estado emocional y tu mente está demasiado agitada como para relajarte.
¿A quién no le ha pasado algo así?
Y no hablo específicamente de un reloj. Bien podría ser una gotera en el baño, algún insecto o hasta los ronquidos de la persona con la que compartimos el cuarto. Y aunque podríamos optar por poner una toalla, atrapar al bicho o despertar a nuestra pareja, también hay otra opción; darnos cuenta que en nuestra mente está la capacidad para regular el volumen de ese molesto ruido.
¿Cómo?
Inténtalo ahora mismo.
  • Cierra los ojos e intenta identificar algún sonido: una conversación, el pasar de los coches, otro reloj o un perro ladrando.
  • Ahora simplemente intenta darte cuenta de tu respiración. Es decir, lleva voluntariamente la atención al flujo natural del respirar intentando verdaderamente sentir como como el aire entre y sale por tus fosas nasales o infla y desinfla tu abdomen.
  • Quizá ese ruido que identificaste siga muy presente en tu mente, por lo que te puedes ayudar contando los ciclos de tu respiración. En donde inhalar y exhalar es uno, inhalar y exhalar es dos, inhalar y exhalar es tres y así sucesivamente hasta llegar a 10, 15 o 20.
  • Si pierdes la cuenta es porque seguramente tu foco de atención está en otro objeto (quizá el ruido o algún otro pensamiento). No te preocupes ni te recrimines y con mucha paciencia comienza la cuenta una vez más hasta que llegues al final.
En términos generales el cerebro humano solo puede concentrarse plenamente en una cosa. Entonces si ante una circunstancia como la del reloj en la noche, nosotros hacemos conscientemente un esfuerzo por cambiar nuestro foco de atención, ese incómodo estímulo disminuirá su volumen hasta que eventualmente pase de nuestra consciencia (como probablemente sucedió en el ejercicio que acaban de hacer).
En otras y más simples palabras, que si pongo mi atención en “eso”, “eso” incrementará su volumen. Mientras que si la aparto, “eso” reducirá su intensidad.
Y curiosamente o no tanto, algo similar sucede con nuestras emociones aflictivas como la ira, la tristeza, el desprecio, el estrés, la ansiedad o la desesperación. Y es que cuando estas se presentan, por lo general nuestra atención está en pensamientos que lo único que hacen es incrementar su fuerza.
Así que ya sea para poder dormir o para no caer en un asalto emocional, vale la pena observar en dónde está mi atención y si es conveniente, moverla.
JMENTALConsultorio
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Un caballero del deporte: "Johnny Wilkinson"

http://psico-deportes.blogspot.com/2014/07/un-caballero-del-deporte-johnny.html 


Si el rugby es un deporte de caballeros, bien estuvo representado por Johnny Wilkinson, temido por su capacidad de transformar la presión en puntos, aun en las situaciones más estresantes. El último grande del rugby, fue nombrado “Sir” por la reina de Inglaterra, pero eso no permitió que continuara con la humildad que siempre lo caracterizó. 
Su ritual y su rutina inolvidable para patear, se caracterizaba por repetir siempre lo mismo. 

Colocaba la pelota hacia el objetivo, caminaba hacia atrás cierta cantidad de pasos, y uno sólo lateral. Centrado con sus pies, con la misma anchura de sus hombros, tomaba sus manos por delante, mirando los postes como perdido en una eternidad. Solamente pensaba que tenía que patear una pelota entre un par de palos verticales. Sus manos entrelazadas, eran la marca definitoria a la hora de sumar.
En una conferencia de prensa explicó, que la colocación de sus manos, era una posición muy importante para él. Formaban parte de su ritual. Ellas “simulaban” una barrera contra el mundo exterior, filtrando toda clase de estímulos que pudieran desconcentrarlo, como ser los miles de aficionados rivales, con sus silbidos o abucheos. Cierta vez, entrenando, encontró esa posición de sus manos, pasó a ser la elegida y nunca más la abandono.

Las técnicas de entrenamiento de Johnny.
Luego de su rutina técnica, comenzaba su rutina psicológica Entrenaba distintos tiros, uno de ellos, tratar de pegarle a la barra del travesaño, en otra, fingía que era un jugador de golf tirando a la bandera, y su pie un hierro siete. Se centraba en el punto de la pelota, y su pierna continuaba la trayectoria al objetivo, el mayor tiempo posible, como en un follow throuhg. En otra situación, imaginaba una boca burlona detrás de los postes tratando de enviar la pelota a ese lugar, pero la más divertida era la de una mujer “Doris”, sentada detrás en la tribuna, tratando de tirarle su lata de Coca Cola.
Johnny, no sentía ni escucha nada, solo veía a Doris, y sentía que sus movimientos eran los correctos. En el momento de patear, esperaba que su figura se enfocara en su objetivo.
En el entrenamiento, se centraba más en encontrar la relajación, el centrado, en el afrontamiento de la situación en su presente.
Junto a su asesor permanente David Alfred, terminaba su sesión con una serie de seis tiros, pero todos tenían que ser perfectos. Si uno de ellos fallaba, comenzaba de nuevo, por eso era muy frecuente, que fuera el último en retirarse del campo de entrenamiento.


La técnica psicológica de la imaginación, la disociación, la visualización, ayuda al jugador a centrarse en su zona. Es en ese lugar, desde el aspecto cognitivo, donde sólo se percibe la acción a ejecutar, se centra en ese punto de atención, por encima de la barra y entre los postes. Johnny, mira fijamente sus manos, es en ese momento que ya está listo, lo demás es historia.
La rutina antes de una acción, también en el golf, o el tenis, es una técnica usada por muchos jugadores y profesionales, que ayuda a lograr mayor concentración, y aislamiento de elementos que pueden des-centrarlo. Son movimientos que se realizan antes de pegar, y que se repiten siempre de la misma manera, pase lo que pase.

En situaciones de presión, engaña a tu mente, pensá en algo neutro, pero no en ninguna palabra que se relacione a resultado. Enfocáte en ese punto, respirá, aisláte de la multitud. Pensá que sólo estás vos, tu pelota y la acción a realizar.

Lic Julia Alvarez Iguña
j.iguna@hotmail.com

La inteligencia es básicamente social

http://www.tendencias21.net/La-inteligencia-es-basicamente-social-segun-un-estudio_a36038.html 

Un grupo de científicos ha hallado las relaciones entre las regiones vinculadas a la emoción, la cognición, y las relaciones humanas


Científicos de la Universidad de Illinois (EE.UU.) han demostrado que la inteligencia es básicamente social, tanto en su aspecto emocional como en el cognitivo. Es decir, que se estructura alrededor de las relaciones sociales. Para ello han analizado el cerebro de veteranos de la Guerra del Vietnam, con diversas lesiones cerebrales, y han hallado relaciones entre las regiones implicadas. Por Carlos Gómez Abajo.


El profesor Aron Barbey. Imagen: L. Brian Stauffer. Fuente: Universidad de Illinois.
El profesor Aron Barbey. Imagen: L. Brian Stauffer. Fuente: Universidad de Illinois.
Mediante el estudio de las lesiones y las capacidades de los veteranos estadounidenses de la Guerra de Vietnam que sufrieron heridas penetrantes en la cabeza durante la guerra, los científicos están abordando - y empezando a responder- viejas preguntas acerca de cómo funciona el cerebro. 

Los investigadores, de la Universidad de Illinois (EE.UU.), han encontrado que las regiones del cerebro que contribuyen a un funcionamiento social óptimo también son vitales para la inteligencia general y para la inteligencia emocional. 

Este hallazgo refuerza la opinión de que la inteligencia general emerge del contexto emocional y social de la vida de cada uno. Los hallazgos aparecen en la revista Brain

"Estamos tratando de entender la naturaleza de la inteligencia general y en qué medida nuestras capacidades intelectuales se basan en las habilidades cognitivas sociales", explica Aron Barbey, de la Universidad de Illinois, profesor de neurociencia, de psicología, y de ciencia de la expresión y de la audición. Barbey condujo el estudio con un equipo internacional de colaboradores. 

Intelecto y contexto social 

Los estudios en psicología social indican que las funciones intelectuales humanas se originan en el contexto social de la vida cotidiana, explica Barbey en la nota de prensa de la universidad. 

"Dependemos en una etapa temprana de nuestro desarrollo de las relaciones sociales: los que nos aman se preocupan por nosotros cuando de otro modo estaríamos indefensos", señala. La interdependencia social continúa en la edad adulta y sigue siendo importante durante toda la vida, afirma Barbey. 

"Nuestros amigos y familiares nos avisan de cuando podríamos cometer malos errores y a veces nos rescatan cuando los hacemos", añade. "La idea es que la capacidad de establecer relaciones sociales y parade navegar por el mundo social no es secundaria a una capacidad cognitiva más general para la función intelectual, sino que puede ser a la inversa. La inteligencia puede originarse en el papel central de las relaciones en la vida humana y por lo tanto puede ser ligada a las capacidades sociales y emocionales ".

Características del estudio 

El estudio incluyó a 144 veteranos de Vietnam heridos por metralla o balas que penetraron en su cráneo, dañando distintos tejidos cerebrales, al tiempo que dejaban intactos los tejidos vecinos. 

Mediante el uso de tomografía computarizada, los científicos mapearon laboriosamente las regiones afectadas del cerebro de cada participante, y a continuación, agruparon los datos para construir un mapa colectivo del cerebro. 

Los investigadores utilizaron una batería de pruebas cuidadosamente diseñadas para evaluar las capacidades intelectuales, emocionales y sociales de los participantes. Luego buscaron patrones que relacionaban daños en regiones específicas del cerebro con los déficits en la capacidad de los participantes para navegar en el espacio intelectual, emocional o social. 

La resolución de problemas sociales en este análisis involucró sobre todo la resolución de conflictos con amigos, familiares y compañeros de trabajo. 

Al igual que en estudios anteriores de inteligencia general y la inteligencia emocional, los investigadores encontraron que las regiones de la corteza frontal (en la parte frontal del cerebro), la corteza parietal (más atrás, cerca de la parte superior de la cabeza) y los lóbulos temporales (en el lados de la cabeza detrás de las orejas) están implicados en la resolución de problemas sociales. 

Las regiones que contribuyeron al funcionamiento social en los lóbulos parietal y temporal se encuentran sólo en el hemisferio izquierdo del cerebro, mientras que tanto el lóbulo frontal izquierdo como el derecho estuvieron involucrados. 

Solapamiento 

Las redes del cerebro que se consideren importantes para la destreza social no eran idénticas a las que contribuyen a la inteligencia general o inteligencia emocional, pero había un solapamiento significativo, señala Barbey. 

"La evidencia sugiere que hay una arquitectura integrada de procesamiento de información en el cerebro, que la resolución de problemas sociales depende de los mecanismos que se dedican a la inteligencia general y la inteligencia emocional", explica. 

"Esto es consistente con la idea de que la inteligencia depende en gran medida de las habilidades sociales y emocionales, y deberíamos pensar en la inteligencia de una manera integrada en lugar de hacer una clara distinción entre la cognición y la emoción y la transformación social. Esto tiene sentido porque nuestras vidas son fundamentalmente sociales: dirigimos la mayor parte de nuestros esfuerzos a entender a los demás y resolver los conflictos sociales. Y nuestro estudio sugiere que la arquitectura de la inteligencia en el cerebro puede ser fundamentalmente social, también." 

Barbey ya había realizado estudios similares sobre veteranos del Vietnam. En 2013 publicó un estudio en el que llegaba a conclusiones parecidas, en concreto, que la inteligencia general estaba relacionada con la inteligencia emocional, tanto en los tests de inteligencia como en las regiones cerebrales afectadas. 

Y en 2012, mapeó por primera vez la inteligencia cerebral, en colaboración, entre otros centros, con la Universidad Autónoma de Madrid.

Referencia bibliográfica: 

A. K. Barbey, R. Colom, E. J. Paul, A. Chau, J. Solomon, J. H. Grafman: Lesion mapping of social problem solving.Brain (2014). DOI: 10.1093/brain/awu207.

Maneras de Ser Más Feliz

http://eldiadespues.net/3-maneras-de-ser-mas-feliz/ 

Por Gonzalo Fuentes

“El regalo de la felicidad pertenece a quienes lo sacan de su envoltorio.”
Anónimo

Llenamos las páginas de internet con millones de artículos tales como:

- 7 maneras de que tu piel luzca mejor.
- Cómo dejar de fumar en 5 pasos.
- 8 pasos para dejar tu trabajo y montar tu negocio.
- 5 tipos de besos que harán las delicias de tu pareja.
- Etc, etc, etc.

Tenemos “pasos” para lograr todo tipo de cosas. ¡Y me encanta! Me encanta descubrir nuevas estrategias para vivir mejor la vida. De hecho el blog en el que ahora te encuentras va de eso.

Pero hoy me voy a pasar de listo. Te voy a ofrecer 3 maneras y 3 herramientas que harán de ti una persona más feliz. Profundamente más feliz. ¿Te suena bien? (Me alegro, porque yo ahora mismo estoy asustado de lo que voy a escribir en las próximas líneas.)

Pero para poder abordar un desafío tan épico tenemos primero que responder a una gran pregunta:

¿Qué nos hace realmente felices?

Guauuu…. Encantado de conocerte. Un placer. ¡Hasta la vista!

¡No! ¡Aquí sigo! Me voy a meter en el fango… Hasta la médula.

Hay muchas cosas que nos hacen felices. Muchas experiencias que podemos vivir. Muchos juquetitos con los que nos podemos divertir. Muchas comidas que podemos disfrutar. Muchos lugares que podemos conocer. Montones de cosas que podemos aprender.  Expresiones artísticas con las que nos podemos conmover.

Pero si tuviera que decir ALGO que nos hace de verdad sentirnos felices y plenos, algo que nos impregna hasta el higadillo, algo que nos hace cosquillitas y nos mueve hasta el último rincón de nuestro ser,…

Si tuviera que concretar y quedarme con ALGO por encima de todas las demás cosas…

Ese ALGO sería…

¡¡¡¡¡¡Las personas!!!!!!!

O lo que es lo mismo…

Tú, Yo, Nosotros,…

O… ¡Por mí y por todos mis compañeros!

La relación con nosotros mismos y con los demás.

Ese es el Eje de Nuestras Vidas.

Por mucho que hagamos, que consigamos, que poseamos, o incluso que nos aislemos, lo más importante de nuestras vidas es nuestra interactuación humana.

La calidad y profundidad de nuestra interactuación humana.

¡La Piedra Filosofal!

Qué tontería, ¿verdad? Estaba delante de tus narices. Una y otra vez. Tú a mil cosas, a mil historias, con la cabeza a tope de pensamientos, buscando la manera de sentirte mejor, y la llave de la felicidad en tu vida estaba en tu casa, en la calle, en el trabajo, en el bar, en tu grupo de ‘lo que sea que hagas’, bajo la forma de…

Personitas Humanas.

Pero me dirás: “¡Gonzalo! ¡Mi felicidad NO puede depender de los demás! ¡Yo soy el que tiene que luchar por ella! ¡No puedo dejarlo en manos de los demás!”

Y yo te diré: “¡Tienes razón! ¡No puedes esperar que los demás te hagan feliz! ¡Pero sí depende de la calidad y profundidad de tus interactuaciones humanas con ELLOS!”

Como dice esta cita que encontré gracias a Ana Bizarro, y que ella encontró gracias a Raimon Samsó:

“La medida del éxito viene por cuantas personas son más felices porque tú existes.”

Piénsalo… Es delicioso…

Pero, ¿cómo podemos hacer para mejorar esa calidad y esa profundidad de nuestras relaciones humanas, tanto con nosotros mismos como con el resto?

Bueno, para eso he escrito este artículo tan estupendo.

Vamos a ello. Pero antes de nada hemos de empezar con la noción más básica de todas. Para comprender desde dónde construir este cambio.

Lo Más Básico Entre Lo Básico


Para poder resolver este gran enigma en la búsqueda de nuestra felicidad, poder utilizar las técnicas más sofisticadas, y poder salir triunfantes de este pantanal en el que me he metido, has primero de saber y reconocer una cosa.

Los cimientos de todo este proceso. Desde dónde comienza todo.

¿Alguna pista? ¿Te lo estás imaginando?

Para poder mover una sola pieza de este rompecabezas has de saber primero responder a esta pregunta:

¿Quién eres Tú?

Sí, Tú. Esa cosa tan bonita que se esconde bajo tu piel. Que respira, disfruta, llora, ríe, trabaja, juega, danza, canta, escribe,…

¿Quién eres Tú?

…………………………………..

Bueno, ¿ya lo tienes verdad? Sigamos…

¿Que no? ¿Que no has respondido ya a esa pregunta? ¿Que no sabes quién eres tú? ¡Venga, hombre! ¿Te lo tengo que decir yo todo o qué?

Joder… Me dais un trabajo que vamos… Pero seré bueno y te lo diré.

Tú… Esa cosa tan bonita que se esconde bajo tu piel… Tú….

Tú eres Amor.

(música de los Beatles sonando de fondo… )

Sí, amig@, herman@, compañer@,…

Tú eres Amor.

¿Y lo sabes, verdad?

Bueno, a veces lo olvidamos. A veces muchas veces. A veces que duran días, semanas, meses, años. Y pensamos, ¿cómo puedo ser Amor con todo lo que me está cayendo, con cómo me siento? Lo sé. Estoy contigo. Es así. Simplemente. No me voy a poner ahora a discutir sobre eso. Es un hecho.

Y ahora que sabes quién eres y de qué madera estás hech@, podemos continuar y ver esos 3 pasos o esas maneras en las que puedes mejorar enormemente la calidad y profundidad de tus relaciones. Y, por lo tanto, ser más feliz(Es que a los blogueros nos encanta dividir todo en pasitos… )

Estas 3 maneras están relacionadas con 3 ideales más antiguos que nuestra memoria.

Nos vamos a poner unas togas en plan Platón y vamos a nombrarlos con solemnidad:

Verdad, Belleza y Bondad.

¿Resuenan un poquito, verdad?

Pero no nos vamos a quedar en pura abstracción. Sino que vamos a sacar el juguito y a concretar lo que necesitamos para nuestro propósito de mejorar nuestras relaciones personales. Voy a daros una herramienta para cada una de estas 3 cualidades.

Veámoslas una por una.

Verdad


Existen tantas verdades como pensamientos. Y el mundo es una maraña infinita de pensamientos. Si cada uno defendiéramos a muerte nuestras verdades, o lo que es lo mismo, cada uno de nuestros pensamientos, empezaríamos por matarnos a nosotros mismos. Lo cual a veces hacemos, pero agradecidos estamos de que este no sea el caso.

A veces “sentimos” la verdad de las cosas. Parece que sí hay verdades ahí fuera. Pero no considero que la verdad resida ni en el contenido de las palabras ni en el contenido de nuestros pensamientos (otra verdad discutible).

La verdad reside más en el cómo que en el qué. Lo que pasa debajo de la superficie. La verdad es más el proceso que lo manifestado. No importa tanto el contenido, sino lo que sucede detrás.

La verdad es la que nos conecta, la que nos sana, la que nos libera. La verdad es una de esas cosas que mejora la calidad y profundidad de nuestras relaciones humanas. Con nosotros y con los demás.

Pero antes de que esto se convierta en un manual de filosofía, vamos a pasar rápido a una herramienta que considero muy útil para conectar con esa verdad que tantos beneficios reporta.

#La Herramienta que Activa la Verdad:

La Vulnerabilidad.

En mi opinión, la vulnerabilidad es un concepto mucho más amplio de lo que solemos pensar. Y dependiendo de cada persona, está se mostrará de una u otra manera.

La vulnerabilidad no es ni ser débiles ni ser víctimas. Y esta es una distinción importantísima. Actuar como víctimas es uno de los peores y más incapacitadores roles que podemos adoptar.

Estas son para mí algunas de las manifestaciones de la vulnerabilidad:

Ser vulnerable es mostrar tu fragilidad. Reconocer que a veces no puedes. O que estás cansado. Que por mucho que lo intentasno encuentras la salida. Ser vulnerable es reconocer tus límites (aunque estos no vayan a durar siempre). Ser vulnerable es ofrecer tu amor, tu cariño y tu atención. Ser vulnerable es abrirte a echar una mano, o aceptar la mano tendida. Ser vulnerable es reconocer tu dolor y abrazarlo. Ser vulnerable es decirle a alguien que te gusta. Ser vulnerable es aceptar recibir. Ser vulnerable es reirte de ti mismo. Ser vulnerable es pedir ayuda para recorrer tu camino. Ser vulnerable es reconocer tus miedos. Ser vulnerable es decir lo que piensas, defender tus valores y mostrar tus gustos.

Ser vulnerable es abrir tu corazón aunque duela. O reconocer que sólo lo puedes abrir hasta cierto punto.

Tu fuerza reside en tu interior. No en lo que aparentas. Y para que se desate tienes que estar dispuesto atravesar la  puerta de tu vulnerabilidad.

Atravesar esa puerta te conecta con la verdad. Con la verdad en tu relación contigo mismo y con los demás.

Hay una práctica con la que puedes experimentar para enriquecer tus relaciones y saborear el lado dulce de la vulnerabilidad:

Dar un pasito fuera de tu zona de comodidad en cada una de las interactuaciones que tengas. Decir algo difícil. Ofrecer un contacto difícil. Decirle algo bonito a la otra persona. O quizás ponerle un límite a la otra persona o mostrar tu desacuerdo. O llegar a un acuerdo. Quizás desvelarle un secreto. Decirle lo que piensas sobre algo aunque resulte incómodo. Sólo tú sabes cuál esTU zona de comodidad.

Eso te acercará un poco más a la verdad y mejorará la calidad y profundidad de tus relaciones. La verdad a veces duele y te aleja de algunas personas pero te acerca más a otras y a ti.

Si quieres inspirarte con un video sobre vulnerabilidad,  pincha aquí.

Bondad


La bondad es una cualidad muy denostada en nuestros días. Aunque todos queremos que los demás sean buenos con nosotros y nosotros con los demás, parece que es algo que no está de moda. Está desfasado ser bueno. Puede que incluso te moleste que te digan que lo eres. Está ese dicho que dice que “es tan bueno que se pasa de tonto”, porque por miedo al rechazo decides ser más bueno con los demás que contigo, esa enfermedad tan tonta que yo llamoagradabilidad.

Y es que hay tanto listo suelto…

Pero tú y yo sabemos que la calidad y profundidad de nuestras relaciones depende de este rasgo sí o sí, ser bueno contigo mismo y con los demás.

Así que veamos la herramienta para esta cualidad:

#La Herramienta que Activa la Bondad:

Ayudarte a ti mismo a conseguir lo que quieres y ayudar a los demás a conseguir lo que quieren.

Tan sencillo como eso. Sé un potenciador de tus deseos y de los deseos de los demás. Y la gente quiere y desea muchas cosas.

Incluso si tienes dudas de que lo que desea esa otra persona pueda ser bueno o no para ella, puedes hacerlo, ya que será trabajo de la otra persona descubrir y aprender sobre lo conseguido. Lo mismo sucede contigo. Permítetelo.

Puedes ayudar a una persona que está buscando trabajo pasándole una oferta, presentarle a alguien que le pueda ayudar en su proyecto (un gran potenciador), regalarle un libro relacionado con su búsqueda personal, regalarle un poco de tu tiempo y tu sabiduría. Lo que sea que le vaya a ayudar a conseguir lo que quiere.

A su vez, aprende a recibir. Permite que los demás te ayuden. No serás mejor por lograr algo sol@. Necesitas a los demás y ellos te necesitan. Nada grande lo lograrás sin ayuda. Y nada grande será grande sino involucra a más gente y les beneficia de alguna manera. Somos una comunidad. No una carrera de galgos.

Abre los ojos y desengrasa tus oídos. A tu alrededor circulan los deseos de millones de personas. ¿A cuántas puedes ayudar?Piensa en grande, pero valora los actos “pequeños”.

Puedes crear incluso un negocio en torno a eso. En realidad es la verdadera esencia de un negocio: dar un servicio a otras personas para que consigan lo que quieren. Si el mundo se rigiera más por este paradigma y menos en hacer más dinero como objetivo prioritario, otros gallos cantarían.

Tus relaciones cambiarán utilizando esta herramienta. Estarás constantemente plantando semillitas de amor. Eso sí, un consejo.NO hagas esto nunca esperando algo a cambio. De esta manera no funciona, pierde su efecto. (A no ser que lo hayas acordado de antemano como es en el caso de un intercambio o un negocio.)

Belleza


La belleza no es tan sólo lo que se ve cuando ves algo que cumple unos cánones de belleza. La belleza es algo que conmueve profundamente a aquel que la quiere ver.

Utilizar las dos herramientas descritas más arriba ya activa de por sí la belleza en tu interior. Pero aun existe otra herramienta que puedes utilizar.

#La Herramienta que Activa la Belleza:

Tu Singularidad.

Expresar y vivir en tu singularidad.

Vivimos en el mundo de las 10.000 formas. Y aunque en esencia todos seamos lo mismo y todos queramos lo mismo, la forma de manifestarse y expresarse en cada uno es completamente distinta.

Tu cara es única, tus ojos son únicos, tu pelo (o no pelo) es único. Tu piel es única, tus manos son únicas.

Y esa es sólo la superficie. Tu manera de VER el mundo ES única. Tú eres un UNIVERSO y una COSMOVISIÓN en sí misma. Tú eres Dios (o el Universo, o la Divinidad, o la Vida) viviendo el mundo de una manera ÚNICA Y SINGULAR. Irrepetible.

Así que honra eso. Y de esa manera estarás aportando Belleza al mundo. Cuanto más quieras encajar en un molde porque así te aceptarán más, te querrán más y te rechazarán menos, menos expresarás y vivirás tu singularidad y menos belleza aportarás al mundo. Estás aquí para aprender cosas nuevas.

Y eso influirá en la calidad y profundidad de tus relaciones.

Porque vivir en tus valores más profundos, bajo tu visión más auténtica, te puede alejar de ciertas personas. Pero te acercará a tu tribu. Te acercará al entorno donde brillas con luz propia.Y estarás aportando belleza y calidad a tus relaciones. Tú eliges.

Muchas veces tenemos miedo a nuestra singularidad y a nuestra propia voz porque en algún momento nos dijeron que el camino y el modus operandi para ser querido y aceptado era uno en concreto. Eso fue hace mucho tiempo. Y se quedó como un mensaje, como un programita en tu interior. Y pasó de generación en generación…

Es hora de despertar de ese mal sueño. Sé tú mism@. Acepta tus gustos, tus valores, siéntete bien. No aceptes la normalidad como norma. Da un pasito detrás de otro, y el velo se irá deslizando suavemente hacia abajo.

Sé Más Feliz


Aquí tienes 3 herramientas para conseguirlo.

Recuerda…


A veces no resulta fácil. Pero observa atentamente las recompensas. Para poder escribir este artículo he tenido que hacer uso de las 3 herramientas de las que he hablado.Ahora, con un poco de miedo, tendré que atravesar la puerta y pulsar el botón de ‘Publicar’.

Recuerda: sé más feliz.

Puedes dejar tu comentario aquí abajo.

¿Es Posible Ser Feliz Sin Los Demás? (Mi cara de tomate explosivo en esta foto parece decir lo contrario.)