Si quiere ser gurú, escriba un libro
La aventura editorial abre puertas para hacer carrera en la consultoría empresarial
Dicen que, durante su paso por la vida, toda persona debería plantar un árbol, escribir un libro y tener un hijo. Pero si usted se dedica al mundo de la gestión empresarial, quizá debería plantearse seriamente aparcar la paternidad y las herramientas de jardinería hasta haber resuelto primero el asunto del libro. Porque hoy muchos de los más reconocidos conferenciantes y especialistas en consultoría para organizaciones son además autores de éxito que apoyan e impulsan sus carreras con la proyección pública que les proporciona la presencia de sus obras en las principales librerías.
Y eso que, salvo honrosas excepciones, escribir hoy un libro empresarial en España no reporta grandes ingresos a sus autores. Y aunque títulos como La buena suerte (Empresa Activa, 2004), de Fernando Trías de Bes y Alex Rovira, oNo miedo (Alienta, 2006), de Pilar Jericó, lograron superar la barrera de los dos millones de ejemplares vendidos, la realidad editorial de hoy es mucho más modesta. Roger Domingo, director editorial de la división de libros de empresa del Grupo Planeta, subraya cómo a raíz de la crisis económica y del cambio tecnológico las ventas han descendido significativamente. “Ahora un libro que supera los 10.000 ejemplares vendidos ya es un best seller”, señala. De los ingresos obtenidos, para el autor queda un 10% en concepto de derechos, lo que a simple vista no parece una cifra mareante. ¿Por qué entonces es tan importante publicar? Este editor recuerda que los económicos no son los únicos beneficios de un libro, ya que “una obra publicada en una editorial con solera otorga prestigio y visibilidad”. Un prestigio y una visibilidad que pueden traducirse en mejor caché y más proyectos de consultoría, más conferencias o más cursos contratados para ese profesional.
LETRAS CON PREMIO
Desde el año 2011 los premios Know Square se han propuesto identificar y promover la mejor oferta editorial publicada en España en materia de gestión empresarial. Innovación, originalidad, humanismo, oportunidad, aplicación práctica, claridad expositiva y enfoques atractivos son los principales criterios por los que se rige su jurado, formado por 25 profesionales procedentes de todos los ámbitos de la actividad empresarial, a la hora de escoger a los ganadores. “Buscamos libros de calidad que fomenten la capacidad crítica y reflexiva del lector”, destaca su fundador, Juan Fernández-Aceytuno. Porque un libro de empresa, sintetiza, “debe aportar conocimientos, experiencia, tendencias, teorías o propuestas que ayuden a al profesional a tomar mejores decisiones”.
En una de las caras de la tarjeta de visita de Luis Lombardero figura impresa la portada de su libro Trabajar en la era digital (Lid Editorial, 2015). Puede decirse que la publicación de esta obra ha tenido un efecto determinante sobre su autor, hasta el punto de marcar un nuevo rumbo en su carrera profesional. Hace unos meses dejó su puesto como director general en una consolidada empresa de e-learning para embarcarse en su propio proyecto empresarial, el Instituto de Talento y Empresa Digital. “El éxito del libro, con una primera edición agotada en solo tres meses, fue el empujón definitivo para tomar la decisión. Ahora vivo la emocionante experiencia de participar en primera persona en esa transformación digital de la que hablo en el libro”, comenta. También Pilar Jericó, que acaba de publicar ¿Y si realmente pudieras? (Alienta, 2016), su quinto trabajo, admite la gran influencia que su faceta de escritora ha tenido en su carrera como conferenciante y consultora. “Mis dos primeros libros me catapultaron en España y en Latinoamérica. Un libro de éxito en el mercado te puede ayudar muchísimo”, afirma la presidenta de Be-Up.
Vasos comunicantes
En muchos casos esas vertientes literaria y profesional se retroalimentan mutuamente. Luis Lombardero destaca que Trabajar en la era digital nace de su tesis doctoral y “lleva detrás un proceso de investigación riguroso y muy documentado que me ha proporcionado un fondo de conocimiento muy útil y aplicable a la situación actual”. Según Fernando Botella, director general de Think&Action, y que tiene actualmente en las librerías El factor H (Alienta, 2016), esa doble faceta produce un crecimiento en dos direcciones. “Lo que aprendes en los proyectos reales con los clientes es una fuente de inspiración para escribir. Y, a su vez, el proceso de documentación del libro te permite incorporar conocimientos que luego utilizas en los proyectos”.
Este solapamiento también tiene su reflejo en las ventas, ya que, aunque los libros empresariales encuentran su hueco en los puntos de venta convencionales, buena parte de sus lectores se concentran fuera de esos circuitos. Foros empresariales, ciclos de conferencias o actos promocionales son los mejores escaparates para este tipo de obras. Fernando Botella calcula que al menos una de las tres ediciones que lleva publicadas de El factor H ha encontrado compradores en alguno de los 15 eventos de presentación del libro que lleva realizados por toda España. Sabedores de esta realidad, antes de lanzarse a publicar un manuscrito, las editoriales no solo tienen en cuenta su calidad. También se fijan en la fuerza de la marca personal del autor y en si ha conseguido desarrollar una comunidad de seguidores significativa que garantice unas ventas mínimas. “Es importante tener en cuenta el volumen de personas que siguen a ese profesional, le consideran un referente, acuden a sus conferencias y estarían, presumiblemente, dispuestas a comprar su libro”, comenta Roger Domingo.
¿Es eso suficiente para tener éxito? Del especialista en liderazgo y autor de clásicos como La sensación de fluidez (Pearson Educación, 2001), Juan Carlos Cubeiro, se dice que lee un libro al día, muchos de los cuales reseña más tarde en su blog. “Para que un libro enganche debe ser ameno, no muy largo, práctico y, a ser posible, contener pensamiento original”, resume. No obstante, para el responsable de talento de ManpowerGroup, el libro perfecto es casi imposible. “Porque calidad y popularidad están cada vez más distantes. Los autores mediáticos que aparecen en televisión suelen escribir textos muy básicos para llegar al gran público. Y la facilidad de lectura muchas veces conduce a la banalidad. Cuanto más aporta un libro, más difícil de leer resulta”, concluye.
¿Cómo saben los autores dónde está el germen de un buen libro? Pilar Jericó asegura que se guía solo por su intuición, aunque antes de poner en marcha un nuevo proyecto literario testa el tema en sus talleres y conferencias “para ver la reacción de la gente”. Por su parte, para Fernando Botella es importante que, además del componente técnico, “el libro tenga una historia que contar, una dimensión narrativa que me motive”. Las últimas tendencias apuntan hacia libros que se alejen del marco excesivamente teórico para abordar un enfoque muy práctico, con abundantes ejemplos y ejercicios que puedan realizar los lectores. Pilar Jericó ha incluido en su último trabajo algunos de los ejercicios por los que cobra en sus sesiones de consultoría. Porque, explica, “el mundo ha cambiado, y ahora el buen escritor no es quien más sabe, sino quien más te ayuda”.
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