lunes, 17 de octubre de 2016

COMPROMETAMOS A NUESTROS EQUIPOS A TRAVÉS DEL ESPÍRITU EMPRESARIAL.

https://ricardlloria.wordpress.com/2016/10/17/liderazgo-comprometamos-a-nuestros-equipos-a-traves-del-espiritu-empresarial/ 
planeta-by-jeff-king
“Tenemos más posibilidades en cada momento de las que pensamos”. Thich Nhat Hanh
Durante los últimos años, muchas personas nos vamos preguntado cómo podemos haber caminado o llegado tan lejos en una carrera tanto en la vida personal como profesional.
El otro día entre amigos, teníamos una cena, dónde el maestro de ceremonias era el cocinero, quien nos daba una lección de liderazgo, sin contar su puesto actual ni su puesto pasado profesional, nos dejaba una frase:
Que buenos somos
Esta frase tan simple, nos demuestra el líder, esa persona que sin ser el jefe, refleja la la esencia de compartir los éxitos, en este caso era algo tan simple como la propia cena cocinada por el mismo, pero a la vez con pequeños ayudantes, que si más no lo íbamos acompañando en sus tareas, es decir los “pinches de cocina”.
Alguien que había visto mundo, miles de experiencias, para contar y nunca terminar, veíamos en el, muchas cosas que nosotros de una forma u otra habíamos vivido con anterioridad fuera de forma personal, profesional, o similar algún compañero a de viaje, fuera familiar, amigo etc.
Había un denominador común, dejar hacer al equipo, que las personas pensaran como hacerlo mejor, que todos, llegáramos a nuestro objetivo, fuera con más o menos tiempo.
También salió que a veces, los sitios dónde estamos, participando, ya sea de forma profesional, social etc. hay algo que impide o pone trabas como es el factor económico, ver los resultados de la cuenta de explotación a final de año, semestre que es beneficiosa, sin tener en cuenta el largo plazo, es decir queremos más para ya, para ahora no para después de 3-4 años o más, es decir, para largo plazo, y así crecer todos juntos. Casos nos contaba, muchos los habíamos vivido en entornos diferentes, casos de falta de humildad, casos dónde la falta de equipo era evidente, casos, dónde la persona responsable no quiere ver más allá que no sea el presente, cuando si en ese momento hubiéramos realizado un análisis de causas y consecuencias, hubiéramos podido hasta aquí basta. Y todo por el “más”.
La pregunta que siempre nos lleva de nuevo a una palabra, la palabra “más”. Esto nos lleva a la famosa frase del “Yo quería hacer algo más”, pensamos más, aprender más, compartir más, comprometernos más, producir más, tener más de un archivo de valores basados en la vida personal como profesional, o laboral.
¿Nos suena como si fuera el compromiso de los empleados, cierto? En la cultura de las organizaciones jerárquicas de hace veinte años, que no existía.
Hoy en día, hay muchos que no quieren el riesgo de tomar decisiones, de auto dirigirse, ya que todavía no están listos para involucrarse más en el trabajo. Los líderes llevaremos a la organización a nuevos niveles de éxito cuando hagamos más participes a todo el equipo a través de nuestro espíritu empresarial, es decir, dejemos que la gente emprenda dentro de la empresa.
Cuando activamos estos deseos dentro de las organizaciones, hacemos la creación de un embudo llena de ideas y de talentos que más adelante los podemos ver en resultados.
El deseo de contribuir de todos con nuestras ideas, competencias y talentos. Los empresarios por lo general, aman la libertad de usar cualquier persona, departamento o equipo para cuando sea necesario y útil.
¿Pero se pregunta si el equipo, persona, departamento pueden hacer algo fuera de lo común? ¿Podemos hacer algo para mejorar?
Es aquí donde radica nuestro equilibrio, el encontrar la forma y manera de no quedarnos obsoletos, tanto a nivel personal como profesional, donde la función de la alta dirección, o el empresario es fundamental para contribuir a la evolución dentro de los cambios de necesidades de los mercados, estableciendo así Sistemas Thinking, generación de una cultura que cree ideas, así como la propiainnovación.
Enganchemos este espíritu de trabajo en nuestros equipos para construir, para salvar las diferencias entre departamentos, así ayudaremos a reducir los silos, los costes, los errores, la falta decomunicación dentro de la organización.
Este espíritu es contagioso y nos contribuye a obtener los resultados cohesivos, positivos, de crecimiento a largo plazo.
El deseo de aprender. Los una parte de empresarios, directivos, mandos intermedios, líderes, están aprendiendo y que trabajan más allá del nivel normal para que esto suceda, reflexionemos si hacen lafunción colaborativa para fomentar el conocimiento, donde dirigirlo, donde hacerlo llegar, en que departamento hacer llegar ese artículo, ese conocimiento, ese cambio de mercado, esa innovación, esa transformación que está sucediendo actualmente.
Imaginémonos los beneficios dentro de la organización si hubiera la participación en este deseo. Dejemos esta imagen que sustituya el enfoque equivocado y la preocupación de la gente que se va de la empresa después de ganar la experiencia. Si les das, ellos no se irán por nada del mundo.
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No existirá la escasez de talento empresarial que quiera solo la seguridad de un cheque de pago, si les damos o nos dan la oportunidad de aprender y contribuir. Apostemos por ello de forma fuerte, poderosa, no hay mayor poder que el conocimiento y elaprendizaje en las personas.
Yo no he tomado un curso en años, pero aprendo todos los días. El Aprendizaje no requiere estudio. Eso es la mentalidad de cambio que marca la diferencia. Jane Hart
El deseo de vencer los obstáculos, que se nos presentan. Los equipos que hemos vivido y hemos visto los tiempos difíciles, podemos tener la misma resistencia y persistencia para superar las dificultades que los empresarios suelen hacer. Cuando veamos este rasgo, si nos comprometemos con la oportunidad y damos el reconocimiento, haremos que los equipos y las personas más fuertes se hacen, en vez de castigar una y otra vez con la cultura del miedo.
En la película titulada Pisa a Fondo (Gung ho), es una película cómica de 1986 dirigida por Ron Howard, protagonizada por Michael Keaton y Gedde Watanabe. La historia nos centra principalmente en la compra y adquisición de una planta de ensamblaje de autos americanos por parte de una multinacional japonesa,(Siendo referencia que el título remarca una expresión china americanizada para referirse sobre el trabajo en equipo) , durante la película aparece lo que sería respirar un “aire o espíritu” desagradable para los demás en las condiciones de trabajo que afrontan todos los días, sin embargo, es una película muy valiosa para explicarnos que la comunicación es esencial para la producción de resultados y alcanzar el éxito organizacional.
Ejemplo fue Toyota que la usó de ejemplo a la hora de trabajar con otros continentes, como podemos leer en la fuente: «Why Toyota Is Afraid Of Being Number One»Bloomberg Businessweek (en inglés). 5 de marzo de 2007.
El deseo de ser reconocidos. Sí, los empresarios, los líderes, las personas con responsabilidad valoran y valoramos el reconocimiento de nuestro compromiso, trabajo exhaustivo. También ocurrirá si hacemos lo mismo con nuestros equipos, con las personas de nuestro alrededor. El reconocimiento de las personas, equipos, organizaciones, al igual que nuestras contribuciones, nos darán un refrescante aire sobre el espíritu y el compromiso de la organización.
El reconocimiento de las contribuciones individuales con todo el conjunto de todo el grupo de personas, fortalece (cuando no se debilite) los resultados de la organización. No es favoritismo. Es una celebración de las personas, de los equipos que inspira y compromete más, para la contribución y el compromiso dentro de las organizaciones, equipos.
Los equipos y los lideres expresan sus emociones dentro de la empresa.
El deseo de tener responsabilidad. El espíritu empresarial se llena con el deseo de hacer que las cosas sucedan. Es una fiabilidad profunda que es difícil de enseñar o entrenar, sólo es práctica, constancia, sacrificio personal para un bien común, es decir el ego no existe. Cuando lo encuentre en nuestros equipos, en las personas que nos rodean, toquémoslas. Necesitamos el compromiso con el objetivo final hacía los resultados, al final lo definimos por la actitud y aptitud frente a las responsabilidades.
La unidad empresarial de resultados no es un deseo que reemplacemos como líderes. Es una sed para cumplir nuestro propósito para que trabajemos mejor y naveguemos conjuntamente.
Hagamos de este deseo con más responsabilidad, sin limitarla a posiciones de liderazgo. No nos confundamos como un desafío a nuestros responsables. La organización experimentará a largo plazo unos beneficios potenciales e imprevistos de forma completa en el compromiso de los equipos.
¿Quién en las organizaciones expone estos fuertes rasgos de cultura empresarial? ¿Quién o quiénes pueden llevarlo a cabo? No se trata de un sólo departamento sino de muchos, en sincronía.
A veces, con un simple decir para todos “Que buenos somos” alienta a todos los miembros del equipo a seguir luchando, a seguir, por muchas zancadillas, problemas, etc. que vivamos, porqué la vida, tanto a nivel profesional como personal no es un camino de rosas, sino es un camino de obstáculos, que tenemos que afrontar, a veces rodear, a veces solucionar, y si no hay solución para que perder el tiempo.
“Si quieres ser feliz, sé feliz”. Leon Tolstoi
Gracias por leerme, por disfrutar,  por compartir.
Gracia
Seguimos aportando.
Ricard Lloria by @Rlloria

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