En la vocación religiosa, se supone que quien llama es Dios, pero analíticamente (psicoanalíticamente) el “quién llama” se vuelve mucho más complejo. Yo pensé que quien llamaba era un objeto interno necesitado, o uno externo necesitado y destruido, que llama a la persona para que le ayude. Pensé que “quien llama” era el súper-yo o el objeto dañado mismo (…), pero quien llama es el niño que hemos sido. El niño que hubiésemos querido ser. Marie Langer
En la vocación religiosa, se supone que quien llama es Dios, pero analíticamente (psicoanalíticamente) el “quién llama” se vuelve mucho más complejo. Yo pensé que quien llamaba era un objeto interno necesitado, o uno externo necesitado y destruido, que llama a la persona para que le ayude. Pensé que “quien llama” era el súper-yo o el objeto dañado mismo (…), pero quien llama es el niño que hemos sido. El niño que hubiésemos querido ser. Marie Langer
No hay comentarios:
Publicar un comentario