En los próximos veinte años cerca de dos tercios de los puestos de trabajo que existen, en concreto un 66% de ellos, podrían ser sustituidos por máquinas, según el Banco de Inglaterra, que apunta que no todos tienen las mismas probabilidades de desaparecer.
Pese a ello, el economista jefe del Banco de Inglaterra, Andy Haldane, advierte que son quince millones los puestos de trabajo que podrán ser reemplazados por robots tan sólo en Estados Unidos. Haldane añadió que“las máquinas son ya capaces de pensar, no sólo de actuar; y la cantidad de habilidades humanas que las máquinas pueden reproducir a bajo coste se están multiplicando”.
A este respecto Sarbjit Nahal, de Bank of America, explica que “son los trabajos peor remunerados los que encabezan el ranking”, en especial los que disponen de un salario inferior a 30.000 libras brutal anuales son los que tienen cinco veces más probabilidades de ser reemplazados por inteligencia artificial que los que los que perciben 100.000 libras al año.
En concreto serán sectores como el transporte o la gastronomía los más castigados con la llegada de la automatización, con avances tecnológicos como el conductor o los coches autónomos. También la profesión de contable es una de las más amenazadas por los robots, con una probabilidad del 95% de que desaparezca.
Asimismo todo el que trabaje en la industria del ocio tiene mayor riesgo de que si empleo desaparezca, sobre todo con estudios como el del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), que concluye que los robots son más eficientes y menos imparciales que las personas atendiendo un bar.
Por su parte, todo aquello que requiera de creatividad o raciocinio será más difícil de sustituir, “al menos a corto plazo, nadie elegiría un robot para que le cortara el pelo; ni tampoco escogerían un robot para cuidar de sus hijos o de sus mayores”, indica Haldane.
A partir del análisis del Banco de Inglaterra, un estudio de Oxford sitúa a terapeutas, sanitarios y trabajadores sociales como los que menos probabilidad tienen de desaparecer. En la parte baja del ranking también figuran los cirujanos o los bomberos, al igual que los granjeros, entrenadores físicos y los clérigos, que cuentan con un 0,01% de ser reemplazados por máquinas. Todo porque son tareas donde “el cara a cara es la clave”, comentaNahal.
Trabajos de nueva creación
Pese al incremento de la automatización, parece que podría darse un aumento del número de puestos de trabajo. Una de las razones del Banco de Inglaterra es el manejo y mantenimiento de esas máquinas, que en los últimos años han creado hasta 10 millones de empleos gracias a la automatización de las industrias. Para el 2020 se espera que se creen hasta 3,5 millones de puestos, donde se verá “una mayor demanda de software” que a la vez hará que crezca la demanda de ingenieros cualificados.
Conforme la tecnología llegue a ser más necesaria también será esencial el papel de profesionales con conocimientos técnicos, un hecho que hará replantearse los actuales sistemas educativos.
De momento es pronto para determinar el impacto real de los robots, pero tanto Erik Brynjolfsson y Andrew McAfee, dos académicos del MIT, argumentan que la relación directa entre población activa y tecnología se rompió en el 2000, y que la distancia entre ambos parámetros aumenta. Además la robótica está provocando una polarización, donde se crean puestos de trabajo cualificados y remunerados por encima de la media, perdiendo personal de baja cualificación.
Tal como ocurrió en la Revolución Industrial, se espera un primer periodo de ajustes, donde se irán generando nuevas profesiones a la par que proliferan los robots.
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