Mtro. Julio César Penagos Corzo
Jefe de Laboratorios de Psicología UDLAP
Lo que te rodea, lo que tienes puesto, las pantalla que ves, lo que permite que llegue a tus ojos esta información es producto de la creatividad. La creatividad es tan valiosa como la vida misma. Sin ella, seguramente tus oportunidades de sobrevivir se reducen significativamente. Todos los días debes resolver problemas, debes atender situaciones para las cuales no tenías previamente una respuesta. Estudiar a la creatividad y fomentar su desarrollo es estudiar y fomentar lo que nos hace mejores.
La creatividad puede estar en varios niveles; desde una creatividad personal, hasta una creatividad de carácter más transcendente. En el primer caso, es un proceso de la vida diaria; en el segundo, se ubican las grandes transformaciones de la historia. En cualquiera de sus niveles la creatividad comparte dos criterios que la definen: originalidad y relevancia. Es decir, llamamos creativo a lo que es original y es relevante o útil.
Sin embargo, el cómo sucede o qué la genera, son aspectos de la creatividad en donde hay mucho camino por recorrer en la investigación psicológica. A pesar de que el interés en la creatividad aparece prácticamente desde los inicios de la psicología, su abordaje científico es relativamente reciente. Se considera como punto de partida de este abordaje la presentación que hace Guilford (1950) en una convención de la American Psychological Association.
El desarrollo tecnológico ha permitido que actualmente se trate de entender desde un punto de vista neurocientífico los mecanismos que están implicados en la creatividad. Aunque este tema en particular probablemente lo abordaremos en otro momento, conviene por ahora comentar que hay evidencia que indica que la actividad cerebral es diferente tanto en personas más creativas vs menos creativas, como entre momentos creativos vs no creativos. Un resumen de los hallazgos en torno a la neurobiología de la creatividad lo puedes encontrar en “Creatividad y Neurociencias” [http://penagos.net/?p=1329.]
La creatividad en las organizaciones
La creatividad quizá es uno de los campos de estudio que mejor vincula la psicología entre lo teórico y lo práctico, e incluso entre las especializaciones de la psicología misma. Por ejemplo, psicólogos organizacionales pueden implementar en la empresa lo que psicólogos experimentales probaron en el laboratorio o encontraron en la recolección científica de datos. Esto es muy importante para la Psicología Organizacional
La creatividad puede ser la habilidad del siglo XXI. En este sentido, Batey (2011) con base en algunas evidencias, sostiene diversas razones para destacar la importancia de la creatividad como una habilidad fundamental en este siglo. Por ejemplo, se pueden destacar las siguiente razones:
· La creatividad siempre está presente en el trabajo diario
· La rentabilidad de las organizaciones tiene como base la creatividad individual
· Las organizaciones son son creativas resultan más rentables.
Sin embargo, también conviene estar alerta a variables que entorpecen o incluso destruyen el desarrollo creativo individual y organizacional. En este sentido destaca un trabajo de Amabile (1998) en el que describe sus hallazgos en torno a acciones que destruyen a la creatividad dentro de las organizaciones, por ejemplo:
· Asignar roles a personas equivocadas (los conocidos de quien asigna),
· restricciones a la libertad,
· baja diversidad en el grupo de trabajo,
· ausencia de estimulación positiva y falta de apoyo, así como racionamiento de recursos.
Estas formas de matar la creatividad resultan más dramáticas si hay sutileza, por ejemplo fingir que se da apoyo pero no se da, o se da a medias.
Las organizaciones requieren de psicólogos que implementen estrategias para facilitar los procesos creativos. Es probable que en muchas organizaciones las personas sean creativas a pesar de las organizaciones o a pesar de los directivos. Como dice Amabile, es más fácil gritar que empoderar.
Afortunadamente cada vez es más claro el interés en la creatividad e innovación pues resultan necesarias para la adaptación de la organización y su supervivencia (Reiter-Palmon, 2011). Como señala Reiter-Palmon (2011), la creatividad en las organizaciones no se limita el desarrollo de productos o de I+D, sino tiene que ver como los mismos procesos de trabajo, la variedad de ocupaciones y la persona misma. Para este tema se recomienda leer el número completo de febrero de 2011 de Psychology of Aesthetics, Creativity, and the Arts, dedicado especialmente a la psicología de la creatividad e innovación en los lugares de trabajo (The Psychology of Creativity and Innovation in the Workplace).
Es importante dejar en manos expertas, por ejemplo en manos de psicólogos experimentados, el desarrollo de la creatividad en las organizaciones. La creatividad es una cosa seria; si una persona no creativa, o sin formación en el desarrollo de habilidades creativas, quiere implementar procesos creativos, lo que hará será generar los mismos procesos de siempre para encontrar las mismas respuestas de siempre, con los mismos errores de siempre.
Si bien no hay recetas para potenciar la creatividad, a nivel individual siempre se podrá señalar que:
· Los retos favorecen a la creatividad.
· Es importante añadir complejidad a las acciones cotidianas, para disfrutarlas más.
· Las ideas se generarán en la medida que se les de oportunidad. Una mente censora no genera ideas creativas.
· Es muy relevante conocer tantos ámbitos como sean posibles.
· Estar conscientes de lo que nos hace diferentes, buscarlo, y usar esto de manera productiva.
Referencias
Amabile, T. (1998). How to kill creativity. Harvard Business Review, 76(5), 76.
Batey, M. (2011). Is Creativity the Number 1 Skill for the 21st Century? Disponible en: http://goo.gl/YvNLu
Guilford, J. P. (1950). Creativity. American Psychologist, 5(9), 444-454. doi:10.1037/h0063487
Penagos-Corzo, J. C. (2012). Creatividad y Neurociencias. Disponible en:http://penagos.net/?p=1329
Reiter-Palmon, R. (2011). Introduction to special issue: The psychology of creativity and innovation in the workplace. Psychology Of Aesthetics, Creativity, And The Arts, 5(1), 1-2. doi:10.1037/a0018586
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