Las emociones determinan nuestra calidad de vida.
El rostro humano es una ventana que nos permite conocer el estado emocional de una persona.
Ayer, mi buen amigo tuitero @davidiemocional, me compartió un artículo que me pareció verdaderamente interesante y que reseño a continuación.
“Before and After: Portraits from Dathun”, retoma un proyecto titulado “Contemplatives” que busca medir los beneficios fisiológicos que produce la meditación en quienes la practican.
Cabe mencionar que otras investigaciones ya han demostrado que el entrenamiento mental impacta directa y favorablemente en el equilibrio emocional y la calidad de vida de la personas, pero en este caso, Peter Seidler (promotor del proyecto y autor del texto) demuestra de una forma diferente y “muy sencilla” las enormes ventajas que ofrece la meditación.
“He pensado el “antes y después” del proyecto para explorar los efectos visibles en los practicantes después de largos períodos de meditación intensa. La pregunta es: ¿cuáles son los cambios observables después de dicha práctica?”
En el primer día de un retiro con una duración de treinta días, Seidler pidió a los participantes que simplemente posaran para una fotografía. Después de un mes, el artista y estudiante de budismo volvió a retratar a las mismas personas pero, en esta ocasión, les pidió llevar a la mente lo que esta experiencia había significado para ellos.
Estos son los resultados:
Desde mi punto de vista, las fotografías de Seidler vienen a complementar otras investigaciones como las realizadas por el Dr. Paul Ekman y el Dr. Alan Wallace, y que sugieren que 45 horas de meditación pueden ser suficientes para empezar a ver un cambio en la salud emocional de las personas.
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