sábado, 26 de junio de 2010

"Comunidad Emprendeora" (“CE”)

“Todos los grandes progresos han sido el fruto de personas poco razonables que hicieron que el mundo se adaptase a ellas; las personas razonables se adaptan al mundo."

- George Bernard Shaw -

Tabla de contenido:

1. Resumen Ejecutivo

2. Razón de ser del Proyecto

3. Análisis del Sector

4. Mercado Objetivo

5. Operaciones

6. Estructura Gerencial y Organizacional
.
7. Alianzas estratégicas y desarrollo futuro


ANEXOS

Anexo I: Programa Taller
Anexo II: Conducta emprendedora y aprendizaje



1. Resumen Ejecutivo


Con el propósito de elevar los niveles de ocupación laboral, los gobiernos promueven la creación de empleos mediante ventajas fiscales a las empresas existentes y similares estímulos a aquellas que se crean ya sea de parte de inversores nacionales o extranjeros. De esa forma se actúa sobre un público emprendedor ya existente y acotado.
La razón de ser de este proyecto es aumentar el público emprendedor que es el que lleva a cabo nuevos emprendimientos. Estos nuevos emprendimientos nacen como micro y pequeñas empresas, que como se sabe son las que generan más puestos de trabajo, ya que las grandes empresas hacen un uso más intensivo de capital y tecnología, que redundan proporcionalmente en menor ocupación.
Por las razones expuestas, aumentar los emprendedores, genera un mayor tipo de emprendimientos de todo tipo (comerciales, sociales, culturales, etc.) que va a redundar en una mejor tasa ocupacional.

Formar emprendedores no es tarea sencilla. El emprendedor es una persona con determinadas actitudes y que puede contar con algunas habilidades y competencias. Una actitud se define como: “la predisposición a responder de manera consistente, a diversos aspectos de las personas, las situaciones o los objetos”. Se infiere la actitud de una persona por la forma que expresa sus creencias y sus sentimientos por su conducta. Las creencias son postulados basados en valores y experiencias del individuo. Se forman principalmente en razón de sus antecedentes socioeconómicos y demás experiencias. Son creencias aprendidas por ejemplo: “persevera y vencerás”. Los sentimientos de las personas derivan de su forma de pensar respecto a una persona, objeto o situación. Una persona que tenga sentimientos positivos hacia la perseverancia, cuando las cosas no salen, su sentimiento naturalmente lo conduce a un comportamiento, que siguiendo el ejemplo anterior, sería de perseverar. Las actitudes se desarrollan como representación de las personas y su entorno social. Se forman prototipos en la memoria de las personas que les permiten evaluar a priori individuos, situaciones u objetos y actuar en consecuencia.
Si se cambia la orientación de los jóvenes al futuro con una perspectiva proactiva de largo plazo y todo ello se da en un entorno que refuerza creencias y desarrolla sentimientos positivos hacia esas conductas, se estarían retroalimentando las actitudes emprendedoras.
De acuerdo con lo descripto, el Taller Plan Emprendedor Personal (P.E.P.) actúa de disparador para dar origen a una “Comunidad emprendedora” que requiere una serie de actividades siguientes para constituirla y consolidarla.
Dadas las características del sector objetivo, que son los jóvenes de 16 a 29 años, se requiere masa crítica para que la propia comunidad brinde las condiciones que se esperan para influenciar en los beneficiarios y en la sociedad, por lo que se piensa en quinientos jóvenes por año con su plan emprendedor realizado. Éstos jóvenes luego se integrarían en un proceso de formación – capacitación – incubación que concluya en emprendimientos que pertenecerán a la comunidad. También se deben realizar actividades de comunicación y consolidación de la propia “CE”, tanto externas, así como aquellas que afecten en su interior su mundo simbólico en lo que tiene que ver con sus héroes, ritos e historias.
La ejecución de estas actividades serán llevadas adelante por una Comisión integrada por …., la cual “ad hoc” adecuará sus estructuras y su funcionamiento a las nuevas actividades, pudiendo reforzar áreas específicas relevantes, así como contratar a quiénes poseen competencias específicas imprescindibles.
Se considera relevante comenzar el desarrollo de las actividades en coordinación con el Programa Emprender. Se espera de futuro la creación de una única comunidad emprendedora que se alimente de ambos programas.



2. Razón de ser del Proyecto

En un mundo que cambia aceleradamente y en el cual la tecnología crea y destruye fuentes de trabajo a igual velocidad, los Estados intervienen para mantener los niveles de ocupación de sus pueblos dentro de valores humanamente aceptables para las sociedades democráticas.

Las estrategias perseguidas, generalmente se orientan a estímulos fiscales a las empresas instaladas para que tomen más personal y también a que se instalen nuevas empresas. En este último caso, se entiende como una visión parcial, ya que alienta sólo a los emprendedores ya existentes, por lo que se está trabajando sobre un número acotado de gente.
En un mundo globalizado, otra estrategia es salir a la caza de los emprendedores existentes en el mundo, a los que se les brindan condiciones especiales que resulten atractivas para que inviertan en el país, condiciones que seguramente no se le brindan a los nacionales.


Hay otra alternativa que impacta directamente en la población. Focaliza en la búsqueda, descubrimiento, desarrollo y crecimiento del número de emprendedores.

Los emprendedores fundan micro y pequeñas empresas, que luego se transforman en medianas y grandes. Generan negocios, crean la riqueza de un país y dan trabajo a otros. Son los verdaderos generadores de empleo ya que ese rol ya no lo ocupan las grandes empresas ni el Estado. En rigor, en vías de la eficiencia, ocurre lo contrario, éstas tienden a expulsar mano de obra.
Este proceso por el cual hay gente que se anima a arriesgar, es lo que genera nuevas unidades económicas, es el principal responsable del nivel de empleo de un país. Hay o no hay más trabajo en la medida que haya gente capaz de generar nuevas empresas, negocios saludables y luego de hacerlo, éstas se mantengan, sobrevivan y se las ayude a crecer.
Esto no resulta para nada fácil, aún en países con un ambiente de negocios favorable, tales como E.E.U.U., cuatro de cada cinco de empresas que nacen no llegan al quinto año de vida.
Pero las que fracasan son las empresas, no así los emprendedores que las crearon. Éstos desarrollan tolerancia al fracaso y terminan aprendiendo de sus propios fracasos. Estadísticamente, el emprendedor tiene éxito en la tercera empresa que crea.
Favorecer este proceso significa acciones de la sociedad civil y de los gobiernos, para animar a más personas a crear empresas (aumentar la tasa de natalidad). Una vez funcionando, asistirlas, acompañarlas, para lograr disminuir la tasa de mortalidad.
Y en el estadio de consolidación, propender a su crecimiento, transformación y vinculación entre pequeñas empresas para lograr grupos que puedan asomarse con éxito al mercado internacional.
Más importante que el proyecto (la eficacia de lo que van a hacer), es el protagonista que emprende, o sea desarrollar al propio emprendedor.
La investigación demuestra que no es posible encontrar un buen plan si antes no hay un “buen emprendedor”, un sujeto que emprende suficientemente motivado y entrenado.
La experiencia también presta atención a otras variables como las actitudes que la gente tiene, porque éstas son la vía de ingreso para nuevos conocimientos, dominio de herramientas y su aplicación (habilidades).
Las actitudes se adquieren así como la persona ha adquirido las que ahora tiene.
Las actitudes, conocimientos y hábitos confluyen en la cultura, que bendice a unos y desvaloriza otros. Que tiene a algunos arquetipos como héroes, pero que no se le ocurre que, alguien que abre su fábrica a las 6 de la mañana y genera un sinfín de actividades y empleos, pueda serlo.
Héroes y antihéroes, el emprendedor ni siquiera es visualizado por los jóvenes, siendo que muchas de sus conductas pertenecen a este útil y valioso personaje social. En efecto, son los emprendedores por ejemplo, quienes organizan el viaje de egresados y logran los recursos para ello.
Pero al mismo tiempo, pareciera que toda la educación formal, primaria, secundaria, universitaria, está destinada a generar solamente al “buen empleado”, es decir, el buen gerente ingeniero, el buen técnico supervisor o empleado, etc. El paradigma de un estudiante universitario destacado sería ingresar a una gran empresa, en donde progresará hasta un cierto punto, pero nunca será su creador ni propietario de ella.
Sacamos buenos empleados justamente cuando ese núcleo de empresas, las grandes, estatales y/o multinacionales, generan cada vez menos empleos por mayor utilización de capital, tecnología o tercerización de actividades. Se orienta a los alumnos hacia el buen empleado cuando cada vez hay menos empleo, mientras que lo que sí hay es más “trabajo”.
Hay menos trabajo en relación de dependencia, pero más oportunidades de crear trabajo para uno mismo (“cuentapropista”) y también para otros. En el país existen numerosas oportunidades para dar respuestas a necesidades, que derivan en generar productos o servicios, que luego que se hayan “trabajado”, proporcionan mucho más que un salario.
Además se agrega la gratificación de ver la idea realizada, el sueño hecho realidad, la organización, los productos, la satisfacción de la gente que los compra o los usa.
El emprendedor comercial es una persona pragmática que resuelve problemas (satisface necesidades) de otras personas y gana dinero. También están los emprendedores sociales, los fundadores de ONG, los emprendedores culturales, educativos, deportivos, universitarios.
Hay emprendedores en los estamentos del Estado, aquel que se arriesga que tiene iniciativa, que organiza, que prueba, que fracasa y se levanta y lo intenta otra vez.
Tienen eso que los ingleses llaman “need to achievement”, que en español se traduce como “tener necesidad de logro”, de bajar a la realidad una idea, de hacerla funcionar, de que las cosas sucedan.
La necesidad de logro es el gran combustible universal, y el que emprende pasa alegremente por muchos sacrificios, y tiene la capacidad de postergar las gratificaciones en procura de sus metas.
El emprendedor no nace, se hace. Se hace a sí mismo, con mayor o menor facilidad si cuenta con un “ambiente” con una cultura favorable, con orientación y apoyo. La perseverancia es aquello que separa a la gente en el camino. La perseverancia se refuerza si se aprecia a otros alcanzar sus logros.
Se pude acompañar pedagógicamente a las personas con distinta perseverancia en su formación de hábitos, y todas progresarán un tanto. Lo que el acompañamiento no puede hacer es reemplazar su necesidad de logro, el empuje o el placer que significa para ellos ver las cosas que soñaron ya realizadas.
Lo que no se puede es generar sueños. Se ha constatado que, por múltiples razones, hay jóvenes y mayores que renunciaron a soñar, que no viven sino que han elegido sobrevivir. Que hay gente para la cual la culpa siempre la tiene otro o se cree presa de las circunstancias, del afuera. Gente que vive en lo que se llama “el discurso de la víctima”.
Un ambiente con una cultura donde conectarse con la propia necesidad de logro resulta difícil y a veces poco práctico, porque la mayoría de las veces se carece de base de sustentación: nos gusta la artesanía, pero no se hace el esfuerzo y la investigación para que los productos se posicionen en determinados segmentos, que estén dispuestos a pagar por ello. Y entonces, los artesanos terminan repartiendo pizza en moto.
Entonces a corto plazo, ello obliga a la gente a trabajar para otros que se animan. Y el trabajo es selectivo.
Pero esto será así hasta que se logre un ámbito con otra cultura y entonces mucha más gente se planteará ese destino. Cuando haya más que se animen a conectarse con su necesidad de logro, más luego serán los que avancen racionalmente a materializarlos.
Los emprendedores necesitan del Estado para que les ayude a crear ese ámbito y también les ayude a conectarlos con su propio entramado de su propio aparato estatal, así como con otras instituciones como bancos, consultoras, universidades, ONG, cámaras empresarias, etc. en donde se puedan apoyar y las ayuden y puedan competir y crecer.
Y ese ámbito es lo que se llama “Comunidad Emprendedora” (“CE”)

Para comprender que se entiende por Comunidad emprendedora, se requiere visualizar primero que un abogado se forma en una comunidad de abogados, un médico en una comunidad de médicos, un ingeniero en una comunidad de ingenieros y así con cualquier ejemplo.

Incluso se plantea que un delincuente se forma en una comunidad de delincuentes. En este caso habrá que desarticular la comunidad o crear otra más poderosa. De todas formas sigue siendo un desafió de comunidad.

En consecuencia un emprendedor se forma en una comunidad de emprendedores.

Sin comunidad, las frases:

“alcanza la cima, prepara tu proyecto, reúne a tu equipo, participa, crea tu propia empresa”, son frases “sin sentido”.

Por sentido, se refiere a que no mueven, no emocionan, no inspiran, pues nadie “descubre” su necesidad de logro. Además se ve que los que emprenden son unos jóvenes vestidos de traje oscuro y resulta que a la chica (adolescente) admira y quiere salir el sábado con un chico que se pinta el pelo verde.

Entonces el emprendimiento es para tipos grises que se parecen a ese señor de 60 años, con corbata y tiradores y que dicen que pagan mal a sus empleados, conclusión no se quiere ser como él.

La invitación central es, “sean el ser que deciden ser”. La autenticidad primero. El ser siempre es una decisión y el tener una consecuencia.

Lo que se debe construir es una comunidad de personas conectadas con su mundo emocional y a las cuales se les develen sus angustias y poner esperanza para esas angustias. Emocionalmente hablando emprendimiento es “necesidad de logro” o sea angustia con esperanza. “Me angustia, enoja, molesta lo que esta pasando y tengo la esperanza de cambiarlo”. En consecuencia me pongo en acción, emprendo. Lo que me angustia, enoja, molesta puede ser cualquier cosa. La calidad de un servicio, la inexistencia de un producto, la falta de un comportamiento, etc. Si me molesta que maten ballenas y tengo esperanza de aportar a que esto no suceda, formo Greenpeace o me enrolo con ellos y desarrollo la acción de cuidar una ballena y enfrentar a los barcos.


De pronto en alguna conversación de esta comunidad de angustiados por las ballenas aparecerá el propósito de conseguir financiamiento y alguien preguntará ¿por qué no hacemos un plan de negocios?

Primero es la angustia que deriva en la necesidad de logro y después el plan de negocios.

Formar emprendedores no tiene que ver con enseñar conocimientos, cualquiera sea éste. El emprendimiento no tiene que ver con el plan de negocios, del mismo modo que un “terrorista” no tiene que ver con la “metralleta”. El “terrorista” se forma en la ideología y en una forma “particular” de observar la realidad que comparte con otros. A partir de esa forma particular de observar la realidad es que se emociona de manera coherente con algunos seres humanos y es diferente a otros. En definitiva, “formo comunidad” al comunicarme (conversar) con otros. Por tal razón, se requiere formar masa crítica, que muchos hablen de lo que van a hacer y comienzan a hacerlo. Ello significa cambiar la cultura, cambiar primero lo que hacemos todos los días, nuestras prácticas y hábitos cotidianos. Valorando la conducta emprendedora formemos cientos, miles de emprendedores. Sus conductas serán modelos y ejemplos. Más cuando hoy se sabe que de acuerdo a Daniel Goleman (Inteligencia Social, 2006) que existen lo qué el autor llama las “neuronas espejo” (mirror neurons). ”Al parecer, distintos experimentos con simios han demostrado que en el cerebro de aquellos hay un tipo de neurona que se “dispara” (se activa) tanto cuando el animal realiza una acción como cuando observa a otro (en especial, de su misma especie) hacer esa acción. O sea, esas neuronas “replican” (“reflejan”como un espejo) el comportamiento del otro animal. Es más, parece ser que algunos experimentos con imaginería de resonancia magnética funcional (fMRI) han encontrado alguna evidencia del mismo tipo de neurona en el cerebro humano. Y se especula que podrían tener un papel importante en el aprendizaje de habilidades por imitación, así como en el desarrollo del lenguaje, y se ha llegado a decir que problemas con este tipo de neuronas podrían estar en la base del autismo. Las neuronas espejo transforman la información visual en conocimiento”.

Cambiemos la información visual, que los jóvenes vean a los emprendedores como una alternativa válida de su desarrollo futuro.

Porque como dice Marilyn Ferguson, “si continúo creyendo en lo que siempre he creído, voy a continuar actuando como siempre he actuado. Si continúo actuando como siempre he actuado voy a continuar obteniendo lo que siempre he obtenido”.


Formar esta comunidad, requiere que el Estado realice diferentes acciones que le son propias, pero manteniendo siempre a la comunidad independiente de su estructura. El desarrollo de una cultura de emprendimiento al interior de la comunidad no puede depender de la estructura ni de las jerarquías del Estado. Más bien debe ser un movimiento que se gesta en sus fronteras y de manera inorgánica en un comienzo. Los emprendedores son un porcentaje menor de la sociedad y no están organizados.

El Estado puede crear las condiciones para que nazcan los futuros emprendedores, los jóvenes, los propios actores y que actuando libremente detrás de sus genuinos intereses individuales, conformen una comunidad que dinamice la sociedad uruguaya al agregar la suma de sus propios comportamientos.
Por ello, se apunta a que los jóvenes “Visualicen” su futuro y luego actúen para llegar a él. Ello determinará que se “comuniquen” entre ellos, en su comunidad y modifiquen los “diálogos” que orienten a la sociedad a nuevos rumbos.

De última, cualquier modelo de desarrollo si no cuenta con emprendedores está destinado al fracaso y éstos son el principal producto que se desea obtener.

La “Visualización”, “anticipación” o “prospectiva”, permite la creación de un futuro deseado, o sea se arranca de una actitud que no parte del presente para predecir, pronosticar o armar un escenario futuro, sino que parte de la configuración de un futuro deseable para, desde allí, reflexionar sobre el presente, “re-significar” lo que en él sucede y, por último orientar nuestro desenvolvimiento hacia el futuro que habíamos imaginado como deseable.
Luego, opera ”la profecía de autocumplimiento”. Esta actitud supone un trabajo sistemático sobre un escenario futuro deseado. Lo importante es que la atención –en primer lugar- no se centra en “tratar de diseñar qué es lo que va a suceder”, sino intentar tener lo más claro posible qué es lo que nosotros queremos que suceda.
Esta intención se basa en imágenes. Es nuestra imaginación que se aloja en el tiempo que todavía no es. Es una construcción imaginativa que nos atrae, que nos motiva, que nos invita a ser alcanzada. Construcción que nace a partir de nuestras emociones, aspiraciones, sensaciones, intuiciones.
Una vez que este futuro deseado es bosquejado, se trata de explicitarlo, hacerlo creíble, imaginar el comportamiento de las distintas variables que intervienen en dicho escenario.
Cuando se habla de crear un futuro deseado, no es adivinar algo que será verdadero o falso. Lo que nos interesa es que el futuro deseado sea una visión lo suficientemente funcional y motivadora como para poder atraer y guiar la forma de pensar y de actuar a partir de dicha visión.
En la creación de un futuro deseado se ponen en juego de un modo integral los componentes más trascendentes del proceso creativo, ya que se necesita imaginación para imaginar dicho futuro, descubrimiento para poner luz sobre las distintas relaciones e interacciones sobre las cuales se desarrollará el escenario de futuro deseado, creatividad para producir alternativas e ideas de cómo alcanzar dicho futuro e innovación para hacer que dichas ideas y alternativas se conviertan en acciones transformadoras concretas en nuestras vidas.

No es fácil desarrollar ese tipo de actitud en la sociedad, sobre todo en aquellas que como la uruguaya básicamente están enfocadas a un pasado que perciben mucho mejor. Es difícil que no se desemboque en el tradicional “veamos que va a pasar y tratemos de adaptarnos”.
También es difícil que se entienda la idea de “futuro deseado”. “En plan de desear- piensan muchos-, puedo delirar imaginando utopías irrealizables y con sólo desearlas no quiere decir que se cumplan”.
Así piensan quienes no han entendido la diferencia que hay entre un “presente que empuja” y un “proyecto que seduce”.
Las conversaciones en nuestra sociedad deberían dejar de girar sólo en lo que nos diferencia o en nuestras limitaciones para mejor comprender la realidad para no quedarnos afuera y pasar así a un trabajo sistemático de “imaginar un futuro a construir, para establecer los límites nosotros”.
Si este trabajo sistemático se hace de modo creativo, inteligente y participativo, seguramente los futuros deseados a alcanzar no serán “utopías irrealizables”. Serán sí, proyectos desafiantes cuyos resultados hoy no se ven perfectamente claros, pero sí se comienzan a imaginar, a delinear, a descubrir (“des-cubrir”), a entrever (“entre-ver”: nótese la diferencia con “pre-ver”) en un conjunto de variables reales e imaginadas.
Por eso, la actitud de crear el futuro deseado es netamente estratégica, en tanto no requiere la precisión y exactitud de un pronóstico necesario para el trabajo operativo cotidiano, ni la especulación propia de las decisiones tácticas que necesitan asumir probabilidades de ocurrencia en función de un contexto en el que intentan manejarse.
La creación de un futuro deseado se desarrolla en un eje de tiempo en el que lo primero es bosquejar una imagen a alcanzar, y a partir de allí se trabaja sobre el presente, generando alternativas para luego ir llevándolas a la práctica.

La intención es una adhesión imaginativa a un fin, seguida de una tensión consciente de realizarlo. La palabra “intención” es similar a “propósito” o “designio”, todas hablan de la determinación de una voluntad en orden de un fin.

Crear: muchísimo más que confeccionar o armar, implica imaginar, construir, descubrir y “hacer que se cree. Es el sentido amplio del proceso que va desde imaginar un futuro hasta hacer lo posible como para que se realice.

Futuro: no sólo nos referimos a un escenario, sino a una dimensión anticipatoria donde “elegimos” una configuración deseada.

Deseado: cualitativamente diferente a la noción de probabilidad, nosotros hacemos que el Futuro deseado se transforme en posible y real, pero su característica principal –para nosotros- es que nuestra intención está allí puesta.

La comunidad pasa a conformarse a partir de los quinientos jóvenes por año, cada uno con su plan con un futuro deseado con un horizonte a diez años. Esta cifra, muestra cómo una sociedad sigue atentamente lo que está sucediendo en cuanto al denominado fenómeno emprendedor, es decir, el lanzamiento de negocios, produciendo distintas distintos segmentos sociales y comerciales dinámicos.

Quinientas iniciativas son quinientas ideas que se ponen en marcha, quinientas necesidades (actuales y potenciales) de proveedores de servicios, quinientas oficinas (o plantas o “galpones” u oficinas virtuales), quinientas nuevas marcas, quinientas posibilidades de hacer estudios de mercado, quinientas redes de servicios que se comenzarán a desplegar (con clientes, proveedores, empleados), quinientas planes de negocio, quinientas cuentas en los bancos.
Esta dinámica de negocios, empresarios y organizaciones que se forman, vinculan, relacionan y negocian es la que se vive en un ambiente que caracteriza a una “CE”.
Emprendedores, empresarios y empresas que buscan coincidencias, imaginan proyectos, se capacitan. En síntesis, emprendedores, empresarios y empresas que “co-evolucionan” creativamente.
Se complementa “el mundo de las empresas” con el de “los negocios” o el de “los emprendimientos” resulta siempre refrescante, ya que esto acerca mucho más a los seres humanos que dirigen esas empresas, que las crean, que las gestionan, que las hacen exitosas.
Se ingresa en el mundo del emprendimiento enfocado a los negocios. Aparecen una serie de riesgos distintos, reglas de juego diferentes: las reglas del mercado, de la “híper-competitividad” , de los números, los pesos, las asociaciones, las franquicias, las licencias, el lucro, el capital, los costos, los beneficios.
Surgen también, necesidad de habilidades y capacidades complementarias diferentes: creatividad aplicada a resultados concretos, la innovación en toda su dimensión, el liderazgo, la negociación, la competitividad, el pensamiento estratégico.

Manejar una empresa, gerenciar un área o emprender un nuevo negocio, son desafíos de diferentes características en tanto se plantean en un entorno formado por unidades definidas y con límites claros, o en un entorno complejo y dinámico donde estos límites y definiciones son difíciles de asir.
Todos estos elementos conforman los ingredientes que condimentan la existencia de una “CE” dinámica que nuestra sociedad está reclamando si deseamos un futuro venturoso y no seguir expulsando y excluyendo compatriotas.

Por otro lado, "en un estudio realizado por la Universidad de Harvard (citado por Rovira Celma, Álex. 2005. "La Brújula interior". Ediciones Urano) se entrevistó a sus estudiantes y entre las diversas preguntas que les hicieron, una trataba sobre las metas en la vida, ¡¡qué querían conseguir en el futuro!!

Sólo un 3 % de los alumnos escribió lo que pensaba hacer en su vida.

Veinte años después, se entrevistó nuevamente a todos. Para sorpresa de los investigadores, aquel 3 % que había establecido sus metas por escrito valía económicamente más que el 97 % restante y no sólo eso, sino que estaban más sanos, alegres y satisfechos y tenían mejor disposición ante la vida que el resto de los ex alumnos entrevistados."

Los que estudian en Harvard constituyen una minoría selecta que no representa a ninguna juventud de ningún país del mundo y por lo pronto tampoco a la juventud uruguaya. No obstante esto, no existirían razones que demostraran que el común de los jóvenes no deba comportarse en términos humanos en forma similar a los que estudian en esa Universidad. Por tal razón, es de esperar entonces que la calidad de vida de todos los jóvenes mejore luego del establecimiento por escrito de sus metas en la vida.

Demostrar esto nos va a llevar diez años. Alcanzará con demostrar que se es culpable que muchos jóvenes uruguayos “valen económicamente más que el resto y no sólo eso, sino que estén más sanos, alegres y satisfechos y tengan mejor disposición ante la vida que el resto" por el hecho de haber participado en el Programa. He ahí el mayor premio al esfuerzo.






3. Análisis del Sector

El Uruguay se debate entre diferentes indicadores que dan lugar a una serie de paradojas. Su población es propia de los países desarrollados en cuanto a su estructura de edades, baja tasa de natalidad y localización, dado que más del ochenta por ciento de los habitantes vive en ciudades.
Por otro lado, registra indicadores de subdesarrollo como se perciben en la siguiente TABLA:
CARACTERÍSTICAS DEL AMBIENTE EN LAS ORGANIZACIONES DE LOS PAÍSES EN DESARROLLO

a) AMBIENTE EXTERNO: ECONÓMICO/POLÍTICO/SOCIAL

i) BAJA PREDICTIBILIDAD DE LOS SUCESOS
ii) GRAN DIFICULTAD EN OBTENER RECURSOS

b) AMBIENTE EXTERNO: SOCIO-CULTURAL

i) ALTA INCERTIDUMBRE Y AMBIGÜEDAD
ii) ALTA DISTANCIA-PODER
iii) BAJO INDIVIDUALISMO/ALTO COLECTIVISMO
iv) BAJA MASCULINIDAD/ALTA FEMENEIDAD
v) BAJO PENSAMIENTO ABSTRACTO/ALTO PENSAMIENTO ASOCIATIVO

c) AMBIENTE INTERNO: CULTURA INTERNA DEL TRABAJO

A) ASUNCIONES DE LO QUE LA GENTE ES:

i) LOCUS EXTERNO DE CONTROL
ii) POTENCIAL FIJO Y LIMITADO
iii) ORIENTACIÓN AL PASADO Y PRESENTE
iv) PERSPECTIVAS DE CORTO PLAZO

B) ASUNCIONES DE CÓMO SE COMPORTA:

i) ORIENTACIÓN A LA TAREA PASIVA/REACTIVA
ii) ORIENTACIÓN A JUZGAR LOS SUCESOS MORALMENTE
iii) AUTORITARIA/PATERNALISTA
iv) ORIENTACIÓN DEPENDIENTE DEL AMBIENTE DE CONTEXTO

FUENTE: ADAPTADO DE KANUNGO Y JAEGER, 1990

Comparando lo mostrado en la Tabla con lo que sucede en Uruguay, un indicador que se desea destacar, es que su gente, lo que incluye a los jóvenes, vive enfocada en el pasado. Una prueba de ello, es que en el año 1999, el 24 de agosto, la Noche de la Nostalgia, se movió más gente que el 31 de diciembre, fin del siglo XX y comienzo del nuevo milenio.
En la Fiestas de la Nostalgia, los jóvenes “se divierten bailando lo que bailaban sus padres”, situación en la cual los mayores, se pueden sentir ridículos y eso les resulta más atractivo que la apuesta al siglo que estaba naciendo o sea el futuro.
Otro hecho demográfico que se constata es la emigración de sus jóvenes, los mejor formados y los más audaces. Entonces, no faltan muchos años para que, al igual que Japón e Italia, la población uruguaya comience a decrecer en términos absolutos.
Causa y resultado de lo anterior, el desarrollo nacional sufre un estancamiento dinámico que ronda los cincuentas años.
Al influjo de los ciclos económicos externos se pasa de etapas de profundo retroceso como lo sucedido el año 2002, a etapas de bonanza económica como la actual, que no se reflejan en un dinamismo propio que generen desarrollo autosostenido.

El envejecimiento poblacional no hará más que agudizar el estancamiento del desarrollo, entre otras cosas por las mayores partidas necesarias que se destinarán en salud y seguridad social en detrimento de la investigación e innovación. También, profundizará la presión tributaria y con ello mermará el excedente para la inversión productiva.

Esto que hoy sucede en el país puede dar lugar a diferentes interpretaciones que no son del caso analizarlas aquí.
Lo que sí no pueden caber dudas es que algunos aspectos culturales de su población (enfoque al pasado, bajo individualismo/alto colectivismo, alto pensamiento asociativo, locus externo de control, perspectivas de corto plazo, orientación pasiva/reactiva a las tareas, orientación a juzgar los sucesos moralmente, etc.), están en la raíz de sus causas.
A la cultura nacional si algo la caracteriza, es de “premiar” el statu quo. Dicha práctica fomenta el conformismo y es común que se tilden de “locos” o simplemente de excéntricos o de “raros” a aquellos que luchan por conseguir su “sueño personal”. Éstos, en la mayoría de los casos, lo llevan adelante contra todo el “establishment”, lo que significa que generalmente enfrenten beligerantes burocracias que viven y luchan, es más cuentan con una salud inmejorable.
Unos autores (Lawrence E. Harrison y Samuel P. Huntington. 2000.
LA CULTURA ES LO QUE IMPORTA: CÓMO LOS VALORES DAN FORMA
AL PROGRESO HUMANO) citando a Daniel Patrick Moyniham afirman: “La verdad central de los conservadores es que la cultura, no la política, lo que determina el éxito de una sociedad. La verdad central de los liberales es que la política puede cambiar una cultura y salvarla de sí misma”.

Por “progreso humano” en el citado texto, se refiere a “un avance hacia el desarrollo económico y el bienestar material, hacia la equidad socioeconómica y la democracia política”. Para Clifford Geertz la “cultura” se refiere a toda las formas de vida de una sociedad: sus valores, prácticas, símbolos, instituciones y relaciones humanas. En este libro que citamos, la cultura lo integran todos los valores, actitudes, creencias, orientaciones y suposiciones subyacentes que prevalecen entre las personas que conforman una sociedad.

La mayoría de los trabajos en este libro se centran en la cultura como una variable independiente o explicativa: la forma en que la cultura afecta el alcance y la manera en que las sociedades consiguen o no consiguen lograr un progreso en el desarrollo económico y en la democratización política. Sin embargo, también estamos interesados en la cultura como una variable dependiente, es decir, la segunda verdad de Moyniham: ¿cómo puede la acción política o de otro tipo modificar o eliminar los obstáculos culturales al progreso?

Las sociedades también pueden cambiar su cultura como respuesta a un trauma importante. Las desastrosas experiencias de Alemania y Japón en la Segunda Guerra Mundial los hicieron dejar de ser los dos países más militarizados del mundo para convertirse en dos de los más pacifistas. El liderazgo político puede reemplazar el desastre para estimular el cambio cultural. Singapur es un ejemplo de que, en ciertas circunstancias, el liderazgo político puede lograr ese objetivo. En este caso la política sí cambió una cultura y la salvó de sí misma.


4. Mercado Objetivo

Para formar parte de la “CE”, se convocarán las personas jóvenes con ciclo básico de secundaria finalizado, para que formulen un Plan Emprendedor Personal que les permite que Visualicen un futuro a 10 años y establezcan la forma de llegar a él.
La meta propuesta es formar 500 jóvenes por año.
Las edades oscilan entre los 16 y 29 años de edad, y se pretende que en la realización de cada taller participen individuos sin distinción de sexo, diferentes edades y experiencias, ya que la heterogeneidad favorece la creatividad y la innovación y por tanto incrementa las posibilidades de sinergia entre los participantes.

De inicio, se priorizará la gente sin ocupación económica, no obstante para dinamizar los grupos, también se dará participación a aquellos que la tienen.
El segmento poblacional de jóvenes entre 16 y 29 años, ronda las cuatrocientas mil personas.


5. Operaciones

a. Se requiere de un canal de difusión que invite a los jóvenes a inscribirse para realizar el Taller, un medio que reciba a los convocados para registrar su inscripción, el armado de los grupos, su convocatoria para el dictado de los Talleres, un salón para el dictado. Debe preverse la realización del Taller P.E.P. en el interior del país, así como de todas las acciones posteriores que se generan como consecuencia de los mismos.
b. El dictado de los Talleres y el seguimiento de los alumnos hasta la culminación de su P.E.P. El Taller tiene como resultado un Plan Emprendedor Personal (P.E.P.) cuyo programa se aprecia en el Anexo I. El P.E.P. se plasma en un documento que le permite al joven monitorear su avance hacia el destino imaginado. Se debe facilitar la confección del documento P.E.P. por parte de los participantes. Para lograr la cantidad de jóvenes que se desea integrar al “CE” anualmente, se deben realizar tres talleres al mes.
c. Asimismo se establecerá un sistema de seguimiento de los resultados que permitirá una continua evaluación de las necesidades para que avancen en su propósito. Dicho seguimiento se realizará en forma grupal, lo que alimentará la interrelación entre los diferentes beneficiarios.
d. De acuerdo a las necesidades de cada P.E.P., se realizarán actividades de capacitación.
d. Los beneficiarios también serán invitados a participar en seminarios y conferencias con personas que puedan actuar de mentores o ejemplos, visitar empresas y organizaciones u otro tipo de instancias sociales que fomenten el sentido de pertenencia a la Comunidad y coadyuven a la necesidad de logro de los participantes.
e. El formar parte de la “CE” además de los beneficios inherentes a dicha pertenencia, dará acceso a otros beneficios tipo “Tarjeta Joven”, los cuales se deben establecer.
f. Se alentarán las propuestas que nazcan de los propios beneficiarios y que caigan dentro de las potestades de la organización convocante.
g. Siguiendo con una estrategia de penetración de la cultura del emprendimiento, se generan eventos masivos. Estos eventos son de mayor escala, impacto y difusión que los citados en el punto d y están orientados a estimular y masificar “el valor” como eje de la identidad de la organización.
h. Ritos que permitan masificar a través de un impacto comunicacional al resto de la población. Por ejemplo “El Día del emprendedor”, donde se realicen actos de reconocimiento y festejo.
i. Campaña comunicacional: lanzar un concurso para elegir logo, mensaje, etc. Se invita a emprendedores de la comunicación que describan como se perciben ellos mismos. Se elige un jurado integrado por el Director del Proyecto, un representante de las cámaras de la comunicación y un emprendedor reconocido en el país. Éste, pasaría a convertirse en mentor e ícono de lo que se desea lograr con este proyecto.



6. Estructura Gerencial y Organizacional

La Dirección será la encargada a una Comisión …. Existe la necesidad de mantener una visión holística del tema, para ir monitoreando las necesidades de todos los programas que funcionan en la actualidad relativos al tema, de manera de acompasarlos con sus propias necesidades y las de la “CE”.

Se requiere a alguien sea responsable de:
a. la comunicación externa para informar y convocar los beneficiarios, los registre y forme los grupos,
b. alguien que dicte los talleres P.E.P. hasta la confección del documento, que en virtud de la especificidad de la tarea, debe ser contratado externamente,
c. alguien responsable de los seguimientos de los beneficiarios de acuerdo a cada Plan, lo que requerirá de un registro de consultores que realicen cada tarea y sean monitoreados por el responsable,
d. responsable de la capacitación, que confeccione los grupos y los temas, de acuerdo a las necesidades que surgen del ítem anterior y coordine con quienes los dictan,
e. responsable de la promoción al interior de la “CE” (charlas, conferencias, publicación con noticias, casos de éxito, visitas, otros beneficios, etc.).

De ser necesario, la Dirección puede delegar la coordinación operativa de todos estos procesos.


7. Alianzas estratégicas y desarrollo futuro

Se considera relevante comenzar el desarrollo de las actividades en coordinación con el Programa Emprender. Este Programa señala un perfil más académico ya que lo integran las universidades, pero es saludable que la cultura que se vivirá en la “CA” derrame en este otro ámbito, así como que no se superpongan actividades similares y que ayude a crearse sinergia entre ambas. Es más, se piensa que la participación de ambos tipos de públicos en actividades conjuntas, refuerza conductas, favorece la creatividad e innovación, generando nuevas asociaciones y propósitos y promueve la integración social, valor muy deseable en una sociedad democrática. Por tanto, se espera de futuro la creación de una única comunidad emprendedora que se alimente de ambos programas.



ANEXOS

Anexo I: Programa Taller
Anexo II: Conducta emprendedora y aprendizaje


ANEXO I

PROGRAMA TALLER
P.E.P.
(Plan Emprendedor Personal)

Carga Horaria: 12 hrs. (8 presenciales)

Cupo: 16 lugares

Profesor: Rafael Rubio

Fundamentación y propósito del Taller

Con el propósito que descubran sus fortalezas y las proyecten al futuro, los participantes del Taller elaboran su Plan Emprendedor Personal con una visión de diez años.

Metodología *

El Taller se desarrolla siguiendo la metodología de los Diálogos Apreciativos que es una filosofía de cambio que parte de la premisa “descubra lo que da vida a un sistema humano y luego déjelo fluir” (http://appreciativeinquiry.cwru.edu).
Temario

I. PRIMERA FASE: DESCUBRIR


Se realiza un diálogo en parejas con el propósito de descubrir el potencial positivo de emprendedor que existe en cada individuo. Esto permite conocer qué es lo que funciona mejor en cada persona y lo que se debe preservar para llegar al futuro.

II. SEGUNDA FASE: DREAM (SOÑAR)

En esta Fase el participante debe visualizar su mayor potencial de emprendedor con un horizonte de diez años.

III. TERCERA FASE: DISEÑAR
Aquí se trata de poder responder a la pregunta: ¿cómo será “mi” realidad de comportamiento como emprendedor? (conjunto de características conductuales que definen a un emprendedor).

Una vez que el sueño ha sido definido, se trata de crear un proceso mediante el cual la conducta elegida sea llevada a la realidad, para poder transitar hacia el sueño.
Aquí donde se debe hacer un claro análisis de las fortalezas con que se cuenta y de los que se podrían necesitar para implementar el Plan de Acción.
También, el modelo comportamiento aquí definido, funciona como “auxilio emocional” para los emprendedores, cuando se enfrentan a los diferentes escollos que se les van presentando.

IV. CUARTA FASE: DESTINO

La Fase final es una invitación a la acción inspirada en las fases previas de descubrimiento, deseo y diseño. Esta es la fase que se trabajará en las cosas que hay que hacer.
La etapa de “Destino” se enfoca especialmente en compromisos personales. Implica el cambio, su estabilidad en el tiempo y el monitoreo del progreso.
Es también conocida como “Obtención de Resultados”.

Aprobación del curso

Se obtiene mediante la aprobación del documento (P.E.P.) que formula el participante luego de finalizado el Taller.


Bibliografía

BARRET, FRANK J. y FRY, RONALD E. (2008) Indagación Apreciativa. Un enfoque positivo para construir capacidad cooperativa, Montevideo, Xn.

ROVIRA CELMA, ÁLEX. (2003) La brújula interior. Conocimiento y éxito duradero, Barcelona, Empresa Activa.

“Hay una verdad elemental que concierne a todos los proyectos de iniciativa y cuya ignorancia hace fracasar infinidad de ideas y planes espléndidos: en el momento en el que uno se compromete definitivamente, entra la providencia. Cualquier cosa que quieras o sueñes que puedes hacer, comienza. La determinación tiene genio, poder y magia. Comienza ahora”.
Goethe


* “Diálogos Apreciativos”

“Diálogos Apreciativos” (http://appreciativeinquiry.cwru.edu/) es
una metodología de desarrollo y transformación social, utilizada para el fortalecimiento de líderes, la creación de consenso, la generación de visiones compartidas y proyectos alineados con las mismas.
Es un método de capacitación que logra al decir de Peter Drucker "hacer efectivas las fortalezas de la gente e irrelevantes sus debilidades". Por ello, "el tipo de pregunta que hacemos, determina el tipo de respuestas que obtenemos. Las semillas del cambio están implícitas en cada pregunta, y así las personas y los grupos crecen y se desarrollan en función de los diálogos que mantienen y las preguntas que se formulan" (David Cooperrider).

Las preguntas descubren el emprendedor que existe en todos nosotros (Descubrimiento). Al decir de Platón: “lo primero es conocerse uno mismo, todo lo que el hombre aprende está ya en él. Todas las experiencias, todas las cosas exteriores que le rodean no son más que una ocasión para ayudarle a conocer lo que hay en sí mismo”. Las preguntas “ayudan a que descubran lo que hay en su interior, ya que como también dijera Galileo "no podemos enseñar a la gente nada”.

Con esa semilla de emprendedor que se tiene, se pasa a “soñar” el futuro y a compartir los sueños, que genera a su vez más retroalimentación (Sueño).
.
Se sabe que se es emprendedor y también se estableció una Visión futura, se pasa entonces a modelar el comportamiento emprendedor (Diseño), el cual es el germen para el cambio positivo que está corporalmente vivo en todas las conductas y decisiones.
Se trata aquí, de poder responder a la pregunta “¿Cómo sería mi realidad comportamental de emprendedor?”. Las imágenes del futuro emergen de los ejemplos positivos, de lo que fueron los participantes en los mejores momentos de su pasado y de las ideas inspiradoras compartidas en la etapa anterior.
Es en esta etapa en que los participantes deben hacer un claro análisis de las fortalezas con que cuentan y de los que podrían necesitar para moldear su conducta.
Por último se llega a la cuarta fase, Destino. La fase final es una invitación a la acción inspirada en las fases previas de descubrimiento, sueño y diseño.
En este punto, se désafía la iniciativa personal. Se busca lograr el compromiso de los participantes a la acción.
La etapa de “Destino” se enfoca especialmente en compromisos personales. Implica el cambio, su estabilidad en el tiempo y el monitoreo del progreso. También conocida como “Obtención de Resultados”.

Los Dialogos Apreciativos son una metodología conocida por su excelencia para promover un cambio cultural.

ANEXO II
Conducta emprendedora y aprendizaje

Existen estudios que indican que la enseñanza del entrepreneurship
en estudiantes de nivel intermedio produce efectos positivos sobre
las características vinculadas al perfil emprendedor.
Por ejemplo, Rasheed sometió a estudio a 502 estudiantes pertenecientes a 28 clases. En algunas de éstas impartió un entrenamiento en entrepreneurship a lo largo de 3 horas semanales durante 26 semanas.
Luego midió características emprendedoras siguiendo el sistema
propuesto por Robinson (1991), el cual señala como características
distintivas del emprendedor la motivación por el logro (achievement
motivation), el autocontrol (control), la autoeficacia (esteem) y la
innovación (innovate).

Como resultados más destacables cabe señalar que los estudiantes que participaron de las clases de entrepreneurship presentaron valores
superiores en cuatro de las cinco variables utilizadas para definir
al emprendedor, demostrando que es posible estimular estas
características a partir de procesos educativos.

Aceptada la influencia del entorno sobre los potenciales
emprendedores y demostrada la posibilidad de estimular
características emprendedoras a partir de la enseñanza, surge
entonces, casi con naturalidad, un destacado interés por la
participación de las Universidades en la dinámica de este proceso, y
la consecuente necesidad de preparar espacios suficientemente
estimulantes para el proceso emprendedor acompañados de contenidos formativos más específicos, que tengan en cuenta que la mayoría de los graduados no trabajarán en grandes organizaciones, las cuales son el centro de la mayoría de los tópicos impartidos en las carreras de Administración, y que adopten una orientación más centrada en lo nuevo antes que en lo establecido, en el líder antes que en el seguidor, en el creador antes que en el administrador (Ronstadt, 1985).

El modelo de Timmons (1991) identifica tres elementos fundamentales
en el proceso de emprendedorismo: la oportunidad, los recursos y la
gente. En la actualidad, los programas o cursos para emprendedores
en general están focalizados en el segundo de estos elementos
(recursos) destacando la elaboración de planes de negocios, marcos
legales, finanzas, marketing y descripciones del emprendedor (Chelén
et al., 1999). No son tan numerosas las aportaciones en cuanto al
desarrollo del denominado capital social ni de la detección de
oportunidades. El capital social ha sido señalado como un factor
fundamental para el éxito del emprendedor (Baron y Markman, 2000).
Baron y Markman lo definen como los recursos individuales actuales y
potenciales que se obtienen de conocer a otros, formando parte con
ellos de una red o simplemente siendo conocidos y teniendo una buena
reputación.

En muchos casos este capital social es el resultado de habilidades
sociales, entendidas como competencias específicas que permiten a
las personas interactuar más efectivamente con otras. Entre éstas
pueden mencionarse las siguientes: percepción social, management de
impresión, persuasión e influencia social y adaptabilidad social. Un
uso adecuado de este conjunto de habilidades tiene una relevancia
esencial en toda una amplia gama de procesos que se producen en la
actividad del emprendedor, desde la realización de presentaciones
ante inversores y clientes hasta la selección de socios y
conformación de equipos y alianzas, donde la diversidad de intereses
y características no resulten en ningún momento un obstáculo
insalvable.

Con respecto a las oportunidades, éstas se relacionan directamente
con la actividad creativa, componente esencial de la innovación la
cual viene a ser como el corazón del emprendedorismo (Thompson,
1999), y que puede ser entendida como la capacidad para generar
ideas o hacer cosas nuevas, a través de procesos que suelen
producirse de una manera intuitiva y no sistemática (Hills et al.,
1997). Un programa que pretenda ejercitar la creatividad deberá
ocuparse de mitigar los efectos de los bloqueos que puedan
presentársele, sean estos perceptuales, culturales o emocionales
(Simberg, 1964).

Los bloqueos perceptuales tienen que ver con el planteo inicial de
los problemas y la inercia para utilizar enfoques alternativos,
debido a la forma en que se nos presentan en un primer momento. Los bloqueos culturales son provocados por las reglas de conducta, de pensamiento y acción que producen la sociedad y que conducen al conformismo. Los bloqueos emocionales están determinados por las tensiones de la vida cotidiana y tienen su raiz en la inseguridad. Una intensa actividad creativa tiene que ver con la facilidad para
relacionarse con lo nuevo, que es a su vez desconocido. En este
sentido es importante destacar que en muchas ocasiones, el sistema
educativo tiende a dar prioridad de lo conocido y hace muy poco por
preparar para afrontar eficazmente los cambios que representan lo
desconocido. Una mejor orientación sería enseñar cómo pensar en
lugar de qué pensar (Olton y Crutchfield, 1969).

2 comentarios:

  1. Rafa, no fue George B. Shaw el que dijo lo contrario del titulo:

    Un hombre razonable se adapta a su medio ambiente.
    Un hombre no razonable persiste en intentar adaptar su entorno a su gusto.
    Por lo tanto, todo progreso depende del hombre irrazonable.

    Carlos

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  2. Exacto Carlos, eso es lo que dice la frase, el razonable se adapta, el irrazonable lo cambia!!

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