Una de las grandes cualidades que diferencian a las personas que tienen éxito de las que no (entendiendo ‘éxito’ como consecución de objetivos), es su gran capacidad para enfocarse en su proyecto.
Son capaces de desarrollar una visión túnel que les impide desenfocarse de su meta, lo que unido a un alto grado de motivación y considerables dosis de esfuerzo, les lleva a conseguir todo aquello que se plantean.
Foto de adactio vía Flickr
Desarrollar esta capacidad de enfoque es una de mis grandes tareas pendientes, ya que la búsqueda de nuevos retos, la inquietud infinita y el generalismo, chocan a priori frontalmente con esta cualidad.
¿Cómo centrarse en una sola cosa cuando hay tantas sobrevolando el firmamento? ¿Cómo renunciar a grandes momentos de Serendipia? ¿Es posible ser Generalista y volcar todos tus esfuerzos en una sola cosa?
Quizás no pueda parecer un tema tan complejo a primera vista, pero en realidad supone un gran reto. ‘Tan solo’ necesitamos definir un gran objetivo, eliminar todo aquello que nos puede distraer e impedir su consecución y centrarnos en el camino que lleva a la meta. Casi nada…
Conseguir tener esa visión túnel supone tener gran parte del camino al éxito asegurado. La cuestión es…
¿Estás dispuesto a salir de tu zona de confort y jugarte todo a una sola carta? ¿Estás dispuesto a decir que NO muchas veces?
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