https://principiodeuncomienzo.wordpress.com/2015/09/30/incertidumbre/
Un nuevo rumbo, un nuevo matiz, un nuevo tú.
No buscaba cambiar el mundo, pero mi mundo lo ha cambiado.
En la vida todo acaba llegando. Por mucho que queramos que lleguen las cosas cuanto antes, todo llega a su debido momento, aunque hay otras veces que no deseamos que hubieran llegado.
Se acerca el día, el sueño va a convertirse en realidad.
Todos los esfuerzos, todas las caídas, todos los quiero, los odiados “no puedo”, las toallas al suelo, van a confluir en un solo punto, el día D.
Cuando estás en la línea de salida de todo proyecto o sueño, las expectativas juegan un papel importante, durante el camino, como en el resultado.
Las expectativas al principio suelen pasar desde un nivel desorbitante hasta un nivel de realidad. Exorbitante, porque te encuentras ante algo que es novedoso para ti, un reto que te hace mucha ilusión, algo inalcanzable que está puesto en tus manos. Estas nervioso, quieres empezar de una vez, que llegue YA el día. Y si pudieras adelantar el reloj para que llegara el día D, lo harías.
Estas cardiaco, por fin, la vida te regala la posibilidad de hacer realidad un sueño, que ibas buscando. Pero después del subidón te das cuenta, de lo que tienes por delante. Viene a tu búsqueda, el amigo “miedo”. “Va a ser algo imposible, ¿para qué dices que si, si no sabes si lo vas a conseguir?, Déjate de locuras, y déjaselo a gente que si puede conseguirlo…”
Sólo se te pasa por tu cabeza, una reflexión: “Joder, es verdad, tenía que haberme callado, ¿Para qué digo que SI?”.
Pero eres un hombre de palabra, has dicho SI, y si la vida te lo ha puesto en tu camino, tiene que ser por algo. Y hasta entonces, todas las oportunidades que habías tenido ante ti, les habías dicho que NO, gracias a tu amigo elMIEDO.
Llegando el día, no debes tener ninguna expectativas en cuestión a los resultados que puedas obtener. Te pondrás más nervioso, te exigirás más de lo que tus fuerzas pueden dar, pero sobre todo no disfrutaras del momento con el que tanto llevabas soñando.
Disfruta del día, de las vivencias que te ocurran, crea tus momentos, sonríe a las adversidades que te puedas encontrar, confía en ti ,visualízate superando y disfrutando de todo, pero no te pongas expectativas, demasiado altas, porque todo lo que tengas a tu alrededor, lo obviaras, perdiendo oportunidades que no volverán a pasar.
Así que no tengo ninguna expectativa respecto a los resultados del día D, solo que quiero pasármelo bien, al igual que he hecho durante todo el camino hasta llegar al mismo.
Estas en la línea de salida, solamente con las expectativas, de aprender de todo lo que ocurra por el camino, del momento que vivas, porque solamente tienes eso, el presente y aprender de cada momento.
No ves la llegada. Esta muy lejana y sabes que el proceso será largo y duro. Es algo que nunca has hecho, y no sabes si saldrá bien o mal. No sabes si te caerás mucho o lo conseguirás rápidamente, no sabes cómo será el recorrido, solamente sabes que tienes que disfrutarlo, con fe y confianza.
Aunque en el momento de nuestras expectativas desorbitantes, el proceso nos parecía algo fácil, no es así. Estamos pisando en la incertidumbre en todo momento, en algo que no sabemos si podremos mantenernos en equilibrio. A ello le añadimos situaciones vividas anteriormente, que no suelen ser muy alentadoras. Y para colmo no tenemos todas las capacidades necesarias, antes de empezar el camino, para llegar a la llegada bien. Además añádele sensaciones como de miedo, vergüenza, dudas .. Durante todo el camino
Así quien te diga que cualquier camino, es fácil, ¡¡TE ESTÁ MINTIENDO!!.
Es un camino, de sensaciones, de pequeños retos que te dan la respuesta si de verdad este reto lo haces por ti o porque te lo han “recomendado” los demás, si tienes un propósito mayor que tú para realizarlo o lo haces por “moda”.
El proceso, te ayuda siempre a darte cuenta quien eres, a que las circunstancias empiezas a superarlas desde tu interior, que empiezas a derribarlas con tu motivación y confianza, no con la razón.
Todo proceso, te enseña. Todo proceso es positivo, aunque estés sudando, dudando de ti, y durmiendo pocas horas. Pero nos han enseñado que si no es fácil, rápido e indoloro, no es bueno, que hay que tirar la toalla a la primera de cambios.
¡¡IMPACIENTES, así nos va!!
A parte de aprender siempre durante el camino, de observar paisajes que nunca te olvidarás de ellos, encuentras personas de las que aprendes. Son los mentores.
Personas que ellos han recorrido el camino, y que quieren ayudarte a que consigas lo que ellos han conseguido. Su experiencia, comprensión, sus abrazos, hacen que el camino sea más liviano, aunque no quitan su dureza. Sus reflexiones hacen darte cuenta que tanto estás en el camino correcto como no, ver cosas que tú no veías y talentos que tenías dormido.
Gracias mentores, vosotros sabéis quienes sois.
Habrá un momento en el que acabe todo, en el que se haya pasado la meta o no se haya llegado, pero el tiempo del reloj, diga que estamos a 00:00.
Mira atrás. No digas nada, observa dónde estás ahora y dónde estabas antes. Y dime qué sientes. Llora, grita, flipa, haz lo que sientas, pero hazlo… Tú solo has sido capaz de dar todo ese paso, de vivir toda esa transformación, de levantarte cuando otras veces solo querías tirar la toalla, de estar llorando y seguir adelante.
¡¡SOLAMENTE TÚ, LO HAS CONSEGUIDO!!.
Podrá ser un camino corto, quizá largo, pero lo has conseguido, has llegado a la meta.
Cuando acabe, mi vida sé que habrá dado una vuelta de rosca. Sé que ya no seré la misma persona que no confiaba en sí misma, que pensaba que todo era imposible y que tenía que conformarse con quien era en ese momento, donde vivía y con su cuerpo. Cuando acabe, sé que tendré un bastón más para guiarme en este mundo de locos racionales,
MI INTUICIÓN.
Confiar más en uno mismo, es darle un canal de radio a tu corazón, es escucharte y saber por dónde tienes que ir, y qué hacer. Tu intuición te dice cuando parar de verdad o cuando seguir aunque las fuerzas no te acompañen.
No solo cuando llegues a la meta, y te den tu premio, serás una personas de éxito, ya lo eres dando un paso adelante ante tu frustración, miedo y desidia que estabas viviendo. No sólo te puedes sentir un espartano cuando llegues a Esparta, sino cuando te estás enfrentando por el camino a Ogros llamados miedos, a Troles llamados vergüenzas, o a Dragones llamados dudas. Ya lo eres cuando por el camino te enfrentas, al mayor de los enemigos, A TI MISMO.
Todo cambio en la vida, produce un resultado. Y siempre positivo aunque no consigas los resultados que esperabas. Aunque pienses que no vale para nada.
Tu vida cambiará, ya no serás el de antes, te conocerás más, descubrirás talentos, otros talentos se transformaran en debilidades, conocerás personas por el camino que te ayudaran y alentaran a seguir siempre, soñaras en grande siempre, dejando la mediocridad a un lado y siempre buscando la excelencia en tu vida, pero teniendo a raja tabla tu ego… pero recuerda, que si no te atreves a conseguir nada en la vida, eso será lo que hayas conseguido al llegar la noche, NADA.
Ha llegado el día, ha llegado el momento de que todo esfuerzo, aprendizajes, se pongan en acción, ha llegado mi transformación personal, ha llegado mi Spartan Race Barcelona.
¿Y qué incertidumbre estás viviendo tú? ¿Qué momento llega para ti y tienes incertidumbre a vivirlo?