enrique rubio royo's insight:
Vivir en la complejidad o nada.
La nueva naturaleza del trabajo (naturaleza compleja como resultado de la hiperconectividad, de interacciones tácitas y no transaccionales o de transfrormación), asociada al manejo de 'excepciones', de tareas no susceptibles de ser automatizadas (no basadas en reglas pre-establecidas), requiere nuevos modelos de gestión organizacional (abiertos, en red, cooperativos), un nuevo 'rol' del liderazgo más como de soporte e inspiración que de dirección, un nuevo espacio de trabajo en red intensivo en conocimiento y creativo.Un nuevo espacio que elimine las 'fronteras artificiales' que limitan la colaboración y comunicación. Se requiere una nueva mentalidad, se requiere promover una cultura en beta permanente y un aprendizaje, también permanente. Las organizaciones necesitan ser conscientes de que nunca jamás se alcanzará un futuro en el que todo se estabiliza, en que no se necesita aprender o hacer cosas nuevas.
Además de esta nueva mentalidad directiva, se necesita también autonomía e iniciativa personal en los profesionales. Lo cuál no es sencillo. Hemos sido formados para asociar a quien nos dirige, la autoridad en el aprendizaje y en el trabajo. Debemos ser aprendices apasionados, adaptativos, innovadores y colaborativos (perfil eAprendiz). Ejercer nuestra autonomía y asumir la responsabilidad y autogestión de nuestro aprendizaje, es solo el comienzo.
"The new networked workplace requires both collaboration and cooperation. Complex problems cannot be solved alone. Tacit knowledge flows in networks through social learning. Learner autonomy is a foundation for effective social learning. It is the lubricant for a more agile organization. Agility becomes a necessity as we deal with increasing complexity. In order to develop the necessary emergent practices to handle complexity we therefore need to cultivate the diversity and autonomy of each worker. We also must foster richer and deeper connections which can be built through meaningful conversations. This is social learning in the workplace.
Change and complexity are becoming the norm in our work".
Todo ello significa acostumbrarnos a 'vivir', a trabajar, 'en el borde de las organizaciones'. En la franja 'borrosa' de la organización, donde la vida es 'compleja' e incluso caótica. En la periferia del ecosistema organizacional (ecosistema ECCO-Suricata), donde existe mayor diversidad, mayores oportunidades para la innovación y la creatividad, y en definitiva mayor y mejor generación de valor. Debemos desplazar nuestra actividad (individual, grupal y organizacional) a dicha periferia, a ese dominio de la complejidad (frente a los tradicionales dominios 'simple' y 'complicado', modelo Cynefin), donde es requisito imprescindible y permanente el aprendizaje social y emocional.
¿Estamos dispuestos a desplazar nuestra actividad a esa periferia, a ese dominio o ámbito de la complejidad?, ¿estamos dispuestos al cambio de mentalidad requerido?...
La nueva naturaleza del trabajo (naturaleza compleja como resultado de la hiperconectividad, de interacciones tácitas y no transaccionales o de transfrormación), asociada al manejo de 'excepciones', de tareas no susceptibles de ser automatizadas (no basadas en reglas pre-establecidas), requiere nuevos modelos de gestión organizacional (abiertos, en red, cooperativos), un nuevo 'rol' del liderazgo más como de soporte e inspiración que de dirección, un nuevo espacio de trabajo en red intensivo en conocimiento y creativo.Un nuevo espacio que elimine las 'fronteras artificiales' que limitan la colaboración y comunicación. Se requiere una nueva mentalidad, se requiere promover una cultura en beta permanente y un aprendizaje, también permanente. Las organizaciones necesitan ser conscientes de que nunca jamás se alcanzará un futuro en el que todo se estabiliza, en que no se necesita aprender o hacer cosas nuevas.
Además de esta nueva mentalidad directiva, se necesita también autonomía e iniciativa personal en los profesionales. Lo cuál no es sencillo. Hemos sido formados para asociar a quien nos dirige, la autoridad en el aprendizaje y en el trabajo. Debemos ser aprendices apasionados, adaptativos, innovadores y colaborativos (perfil eAprendiz). Ejercer nuestra autonomía y asumir la responsabilidad y autogestión de nuestro aprendizaje, es solo el comienzo.
"The new networked workplace requires both collaboration and cooperation. Complex problems cannot be solved alone. Tacit knowledge flows in networks through social learning. Learner autonomy is a foundation for effective social learning. It is the lubricant for a more agile organization. Agility becomes a necessity as we deal with increasing complexity. In order to develop the necessary emergent practices to handle complexity we therefore need to cultivate the diversity and autonomy of each worker. We also must foster richer and deeper connections which can be built through meaningful conversations. This is social learning in the workplace.
Change and complexity are becoming the norm in our work".
Todo ello significa acostumbrarnos a 'vivir', a trabajar, 'en el borde de las organizaciones'. En la franja 'borrosa' de la organización, donde la vida es 'compleja' e incluso caótica. En la periferia del ecosistema organizacional (ecosistema ECCO-Suricata), donde existe mayor diversidad, mayores oportunidades para la innovación y la creatividad, y en definitiva mayor y mejor generación de valor. Debemos desplazar nuestra actividad (individual, grupal y organizacional) a dicha periferia, a ese dominio de la complejidad (frente a los tradicionales dominios 'simple' y 'complicado', modelo Cynefin), donde es requisito imprescindible y permanente el aprendizaje social y emocional.
¿Estamos dispuestos a desplazar nuestra actividad a esa periferia, a ese dominio o ámbito de la complejidad?, ¿estamos dispuestos al cambio de mentalidad requerido?...
"o eso o nada" dice Harold Jarche.
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