“Si te enfocas en los resultados nunca tendrás nada. Si te enfocas en lo que tienes que hacer, los resultados llegarán”-Jack Dixon
Tu manera de ver las cosas, las ideas y la forma en que tratas los problemas relativos a ellas, esto es el enfoque, poder emprendedor que nos dotará de concentración y que pondrá a prueba nuestras emociones.
Por: Emprendiendo
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Desde que somos pequeños el enfoque se hace presente, incluso cuando ni siquiera podemos pronunciar palabra. Queremos ponernos de pie y caminar. Lo intentamos, empezamos a ras del suelo -gateando- y poco a poco empezamos a ponernos de pie aunque a los segundos caigamos hasta que un día, de repente, dimos los primeros pasos.
Este es el poder que va a permitir no distraernos de nuestro objetivo. Es nuestro norte en la brújula.
Es común que al caminar y no ver algún resultado inmediato empieces a distraerte y considerar abandonar tu sueño, empiezas a desenfocarte o incluso permitir que te desenfoquen, así es que lo primero que tienes que hacer es apalancarte de este poder y no perder tu objetivo.
Cuando sabemos utilizar el enfoque nos convertimos en grandes observadores. Nos permitimos analizar mejor las cosas sin tomar decisiones cotidianas como pelearse con el mundo entero o querer salir corriendo, al contrario, somos capaces de tomar un respiro y permanecer serenos, observar, resolver y continuar.
El enfoque también es el que va a permitir mantenerte presente. Si bien en ocasiones es importante no olvidar el pasado, en el caso de nosotros los emprendedores eso se deriva en auto-etiquetarte sobre todo si del lado negativo se trata. Si en alguna ocasión recibimos un no, o no pudimos lograr algo, lo traemos al presente al ocurrir alguna situación similar es cuando nosotros mismos nos descalificamos. Deja atrás los resultados y enfócate en el aquí y en el ahora, ya que siempre habrá nuevas situaciones por resolver y nuevos retos que conquistar.
Una vez concentrados, lo único que nos resta es avanzar con la mejor actitud y disponibilidad ante lo que se nos pueda presentar, aprender a ser el protagonista de la película y al mismo tiempo el espectador, ese que al permitirse observar y enfocar sabe la respuesta que busca el personaje principal durante toda la trama.
#AbrazoEmprendedor
Emprendiendo
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