Existen tres tipos de atención bajo el gobierno del cerebro: la selectiva, la sostenida y la dividida. ¿Cuáles se usan en la vida cotidiana? El neurocientífico Facundo Manes explicó todos los detalles en #CerebrosenRed
El mecanismo de atención es clave para diferente funciones cerebrales, y se logra cuando se dirigen los recursos hacia un foco específico en un tiempo determinado. Pero ¿cómo funciona? El prestigioso neurólogo y neurocientífico argentino Facundo Manes, creador del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO) y del Instituto de Neurociencias de la Universidad Favaloro, lo develó para Infobae.
“SÓLO PERCIBIMOS LO QUE ESTÁ EN NUESTRO FOCO DE ATENCIÓN”
Existen diferentes procesos de atención que requieren de complejos sistemas cerebrales, particularmente de las áreas frontales y parietales, tal como explicó el experto.
“La atención selectiva, por ejemplo, sucede cuando estamos en una fiesta y hay mucho ruido alrededor nuestro pero queremos escuchar detalladamente a la persona que no está hablando. Para eso, tenemos que filtrar estímulos irrelevantes que suceden alrededor”.
En otros casos, dijo, se necesita concentrarse un tiempo determinado en una tarea y por ende, se denomina, atención sostenida. “Esto ocurre por ejemplo cuando uno estudia o tiene que ejecutar un instrumento musical”.
También, existe además la atención dividida que permite alternar el foco entre diferentes estímulos. “Por ejemplo, cuando uno está en la computadora pero a la vez, escucha la radio o está comiendo y tiene que resolver otra cuestión familiar”.
Dijo Manes: “Es muy importante pensar el proceso de atención como clave para la realización de otras tareas cognitivas e intelectuales. Por eso, un déficit en la atención conduce a un déficit en memoria u otras funciones cognitivas”.
¿Cómo se puede recordar aquello a lo que no se le presta atención? “La atención entonces resulta clave para percibir el mundo que nos rodea pero además, para aprovechar aún más de nuestra experiencia”.
La serie #CerebrosenRed propone ir develando estos enigmas con información, estadísticas y documentos exclusivos acerca del funcionamiento del órgano más fundamental de nuestro cuerpo. Seguilo todas las semanas en Infobae.
“La atención selectiva, por ejemplo, sucede cuando estamos en una fiesta y hay mucho ruido alrededor nuestro pero queremos escuchar detalladamente a la persona que no está hablando. Para eso, tenemos que filtrar estímulos irrelevantes que suceden alrededor”.
En otros casos, dijo, se necesita concentrarse un tiempo determinado en una tarea y por ende, se denomina, atención sostenida. “Esto ocurre por ejemplo cuando uno estudia o tiene que ejecutar un instrumento musical”.
También, existe además la atención dividida que permite alternar el foco entre diferentes estímulos. “Por ejemplo, cuando uno está en la computadora pero a la vez, escucha la radio o está comiendo y tiene que resolver otra cuestión familiar”.
Dijo Manes: “Es muy importante pensar el proceso de atención como clave para la realización de otras tareas cognitivas e intelectuales. Por eso, un déficit en la atención conduce a un déficit en memoria u otras funciones cognitivas”.
¿Cómo se puede recordar aquello a lo que no se le presta atención? “La atención entonces resulta clave para percibir el mundo que nos rodea pero además, para aprovechar aún más de nuestra experiencia”.
La serie #CerebrosenRed propone ir develando estos enigmas con información, estadísticas y documentos exclusivos acerca del funcionamiento del órgano más fundamental de nuestro cuerpo. Seguilo todas las semanas en Infobae.
es muy cierto..la atencion es muy importante xa recordar echos importantes de nuestra vida cotidiana...
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