martes, 25 de junio de 2013

Storytelling

http://www.soymimarca.com/storytelling-el-kit-basico-para-emprender/?utm_source=feedburner&utm_medium=feed&utm_campaign=Feed%3A+soymimarca+%28soymimarca%29 

Publicado por: Jordi Collell 


Comentamos muchas veces que las cosas han cambiado y que en materia de trabajo nada volverá a ser como antes, que hemos de ver la realidad con nuevos ojos, lo llamamos el cambio de paradigma, y actuar en consecuencia para no quedarnos anquilosados en un pasado que se fue para siempre. En estos  nuevos tiempos  el trabajo de por vida se va volviendo un recuerdo cada vez más difuso y si no nos preparamos para funcionar por proyectos acabaremos fuera de juego; nos guste a no hemos de actuar con mentalidad emprendedora, buscar e identificar las oportunidades y conseguir que nos elijan.
Flickr CC
Flickr CC
Emprender en la vida es algo que, de no llevarse, se puede entrenar y en cualquier caso es necesario dejar que las ideas fluyan para aceptarlas como vienen, sin prejuicios, vergüenzas ni miedos. Tener la mente abierta y una cierta dosis de ingenuidad  ayudarán a abrir el camino siempre con un mapa en la mano para no andar a trompicones y dar demasiados palos de ciego.
Hace unos días me encontré con dos individuos de ocho años que en la fiesta de su colegio estaban vendiendo petardos de papel. Se trataba de  una hoja de papel convenientemente doblada que agarrada por un extremo y lanzadas hacia delante sin soltar producía un ruido seco y potente similar a un petardo. Me comentaron que se trataba de una apuesta ecológica porque el papel era reciclado de la basura de sus respectivas casas y que se habían metido en este tinglado porque sabían que una fiesta de verano sin petardos no es fiesta pero que en el cole la pólvora no entraba ni por recomendación. Cada artefacto se vendía a cincuenta céntimos y pretendían colocar un stock de cincuenta unidades, suficiente para proporcionarles los recursos necesarios para tener autonomía financiera durante toda la fiesta.
Sea por curiosidad o por deformación profesional me dediqué a seguirles los pasos desde cierta distancia para ver como evolucionaba el asunto.
Cuando acababan de contarme su idea de negocio se acercaron unos compañeros, que me dijeron que eran de su curso, para decirles que estaban locos, que cómo pretendían que alguien les comprara semejante tontería; que no venderían ni uno, vaya. Me sorprendió la seguridad con la que al unísono contestaron los noveles empresarios que propusieron montar una porra para ver quien adivinaba la cantidad vendida y que ellos apostaban por la totalidad.
Tenían producto, unas ganas locas de vender y abordaban a su clientela explicando supropuesta de valor y las bondades de un producto construido con material reciclado
Al cabo de dos horas tenían su producción vendida y estaban haciendo cola para comprarse unas latas de bebida y pedazo de pastel. Por suerte para sus agoreros colegas no hubo porra.
Al final de la tarde uno de ellos invirtió lo que le quedaba en unos boletos para la tómbola y acabó con un espléndido robot para amenizar las tardes de verano.
Un proyecto emprendedor es eso, una idea bien estructurada que arropa una propuesta de valor dirigida a un público objetivo que explicada con un mensaje claro y convincentea través del canal adecuado se convierte en un negocio de éxito. Si a ello le unimos un bajo nivel de inversión, como en el caso que os he contado, miel sobre hojuelas.
Y por cierto un proyecto es solo eso, un proyecto. Después viene otro y otro, la vida es una suma de proyectos y si esperamos encontrar el proyecto de nuestra vida, el que nos saque el estómago de penas para siempre posiblemente acabemos nuestros días pobres y esperando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario