La risa es una respuesta que debemos emplear con mayor frecuencia. Diversas investigaciones mostraron cómo las personas que se toman la vida con más humor y menos enojos llevan una vida con menos estrés y más saludable.
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Autogestión emocional, meditación y respiración son hoy en día habilidades que se buscan desarrollar para poder lograr autocontrol y vivir con menos estrés en un mundo lleno de exigencias y urgencias. Sin embargo, hay algo que los homo sapiens sapiens nos hemos olvidamos de aprovechar y nos hace muy bien: reírnos.
Son númerosas las investigaciones que presentan el valor que tiene la risa para toda la UCCM (unidad cuerpo cerebro mente) y nuevos estudios muestran que ésta genera ondas cerebrales similares a las asociadas con la meditación.
Uno de los trabajos que permitió observar el tipo de ondas cerebrales producidas durante el proceso de meditación fue realizado por científicos de la Universidad de Wisconsin-Madison, Estados Unidos, quienes dispusieron 256 sensores alrededor de la cabeza de Matthieu Ricard, biólogo molecular y monje budista, conocido como “el hombre más feliz del mundo”. De este modo pudieron observar cómo meditar genera un alto nivel de ondas gamma.
Las ondas gamma se asocian con las actividades mentales de alto procesamiento y flujo cognitivo. La mayoría de las investigaciones sugieren que estas ondas permiten una mejor sincronización neuronal de distintas áreas cerebrales relacionadas con la atención, la memoria de trabajo, el aprendizaje y, también, con la metacogniciónón y sus funciones de autoobservación, monitoreo de las acciones y detención de errores.
Pero si meditar hace bien y reir también, tal vez ambas manifestaciones tengan algo en común, y esta fue la pegunta que llevó a los neurocientíficos de la Universidad de Loma Linda, Estados Unidos, a investigar y monitorear las ondas cerebrales de un grupo de voluntarios mientras veían programas de humor, espirituales y otros angustiantes.
Cuando los participantes miraban, por ejemplo, partes de películas de terror, la actividad eléctrica que se observaba se daba en varias regiones cerebrales, en frecuencias bajas, como si no quisieran estar allí. En el caso de los videos relajantes, se producían ondas alfa, relacionadas con el reposo. Ante los videos de humor, que generaban carcajadas, se podía ver cómo las regiones corticales se sincronizaban gracias a los altos niveles de ondas gamma, las únicas que se encuentran en todo el cerebro.
Los profesionales, liderados por el profesor Lee Berk, afirmaron que se trata de resultados preliminares, aunque “esto significa que el humor en realidad involucra una experiencia total en el cerebro similar a la meditación y que, con la risa, es como si el cerebro recibiera un entrenamiento. Este efecto es importante porque permite ser capaces de pensar con mayor claridad, tener pensamientos más positivos y conciliadores, además de poder tomar decisiones claves en nuestra vida de una forma más serena”.
En sus investigaciones sobre la relación entre las emociones, el sistema circulatorio y el corazón, el Dr. Michael Miller, de la Universidad de Maryland, Estados Unidos, pudo encontrar que las personas que se toman la vida con más humor y menos enojos son menos propensas a las afecciones cardiacas.
Las ventajas del reirse se extienden también al sistema cardiovascular, debido a que la risa puede expandir el tejido que forma la cubierta interna de los vasos, lo que permite un mayor flujo sanguíneo, además de generar óxido nítrico que hace a la buena salud del corazón.
Ahora pensemos en nuestro lugar de trabajo y en si es normal ver rostros sonrientes. Las investigaciones en neurociencias presentan que un ambiente laboral ameno, amigable y que promueva el buen humor es un lugar con menos estrés y más colaboración entre sus integrantes.
La risa es una reacción natural que viene impresa en nuestros genes. No exige tiempo de entrenamiento para que disfrutemos de sus beneficios y no tiene efectos secundarios negativos, además, no cuesta dinero y es de libre acceso para todos.
Si por algún extraño motivo se había olvidado de ella, al igual que le está pasando a otras personas ―tal vez por el efecto nocivo del estrés en el cerebro―, recuerde que un buen antídoto es reirse :).
Bibliografía:
- Lutz A, Greischar LL, Rawlings NB, Ricard M, Davidson RJ. Long-term meditators self-induce high-amplitude gamma synchrony during mental practice. PNAS 2004 101 (46) 16369-16373; published ahead of print November 8, 2004, doi:10.1073/pnas.0407401101.
- Miller M, Playa V, Mangano C, Vogel AR. Positive Emotions and the Endothelium: Does Joyful Music Improve Vascular Health? American Heart Association, Inc. Circulation. 2008;118:S_1148.
- Federation of American Societies for Experimental Biology (FASEB). "Fight memory loss with a smile (or chuckle)." ScienceDaily. ScienceDaily, 27 April 2014. <www.sciencedaily.com/releases/2014/04/140427185149.htm>.
- Miller M, Fry WF. The effect of mirthful laughter on the human cardiovascular system. Med Hypotheses. 2009 Nov;73(5):636-9. doi: 10.1016/j.mehy.2009.02.044. Epub 2009 May 27.
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