El poder está dentro de mí II
“Busque en su interior, con absoluta sinceridad, qué quiere ser, adónde
quiere llegar, decídase y comunique su intención con la pasión más absoluta”. Jack Welch
A continuación, algunas de sus sugerencias.
• Llegue más temprano, váyase más tarde, trabaje mucho. Y ofrézcase a hacer más.
• Siempre demuestre una actitud positiva en el trabajo. Y si flaquea, que no se note. Antes de salir por las mañanas, practique frente al espejo.
• Cuídese e inste a los demás a hacerlo. Del bienestar físico depende el mental; y la respuesta al estrés.
• Renueve el significado de la idea —y de la práctica— del “management visible”.
• Aparte del camino la basura que va cayendo para evitar que se acumule.
• Trate de olvidar “aquellos viejos tiempos de bonanza”. La nostalgia es autodestructiva.
• Permítase consolarse pensando que, “como todo, ya pasará”; pero no olvide que tal vez pase mucho tiempo antes de que eso ocurra, así que dedíquese a hacer lo más que pueda con lo que tiene a su alcance.
• Use el teléfono. Manténgase en contacto con todos.
• Rompa la rutina. Invente excusas para cambiar (eso evita la depresión y renueva la perspectiva).
• Simplifique al máximo.
• Preste atención a los detalles. Una vez más. Y otra.
• Mantenga el cielo como límite y no resigne, por ningún concepto, los estándares de excelencia por los que siempre midió el desempeño de cada área de su empresa.
• Convierta en su obsesión responder hasta al más pequeño de los problemas.
• Encuentre la forma de rodearse de personas jóvenes y manténgalas siempre cerca —son menos proclives a unirse al bando de los que creen que “el cielo se está cayendo”.
• Aprenda nuevos trucos de su negocio o su industria.
• No se permita pensar que la actual situación es algo por lo que “simplemente hay que pasar”. Es un examen final. La materia: carácter.
• Teja redes sin parar. Dentro de la compañía, ocúpese de conocer bien a los que “hacen el trabajo”. Fuera de la compañía, también.
• Agradezca a los demás si las cosas salen bien. Asuma usted la responsabilidad si algo malo sucede.
• No disfrace la realidad ni esconda la verdad. Los seres humanos son extraordinariamente resilientes. Lo que mata es el rumor.
• Haga de los pequeños éxitos grandes victorias. Y no olvide celebrarlas.
• Sacúdase las pérdidas de los hombros (aunque le duela el estómago), vuelva al camino e inténtelo de nuevo.
• Evite a las personas con actitud negativa. Contaminan el ambiente.
• Duplique, triplique los esfuerzos para “calzarse los zapatos del cliente” (especialmente si no le gustan).
• Cuide las formas —y perdone los malos modales de los otros a la luz de las presiones que soportan.
• Olvídese del juego de las culpas en cuanto llega a la oficina.
• Transfórmese en un modelo de responsabilidad personal.
• Y rece…
Jack Welch
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario