La vida evoluciona y tu entorno está cambiando, cambia tú también. Si seguimos esa idea es bueno que entiendas que efectivamente un trabajo que te gusta (y parece que la cafetería no era tu vocación) y una buena red social mejorarían mucho tu calidad de vida, pero a veces el control total de esos factores no es solo externo.
Dice un proverbio que “Quien quiere hacer algo encuentra un medio; quien no, encuentra una excusa”. Pregúntate a ti misma qué puedes hacer para mejorar tu vida, ¿cómo de feliz me hace actuar?, ¿puedo buscar un grupo de teatro en mi tiempo libre?, ¿qué asociaciones culturales me interesan?, ¿cómo puedo mejorar mi cv?, ¿es bueno que siga buscando otro trabajo que me guste más?, ¿me estoy rindiendo? Movimiento, movimiento, movimiento… es la clave para que no sientas que no te gusta el rio dónde te estás bañando. Es difícil que no haya gente interesante en tu ciudad, pero no están buscándote a ti. Hacer amigos a determinadas edades es más complicado, pero no difícil y menos imposible. Además, hacer amigos es bueno para la salud. Que no decaigas en el empeño.
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